El dólar blue se vende este martes 16 de mayo de 2023 a $495 en las cuevas del microcentro porteño, 12 pesos más caro respecto al valor con el que cerró en la rueda anterior, jornada en la que también pegó un salto fuerte.
En tanto, la divisa estadounidense para la compra se consigue a 490 pesos en el mercado paralelo.
Luego de las medidas anunciadas por el Gobierno nacional, suba de tasas y demás, no alcanzaron para frenar la suba del dólar blue.
Cotización del dólar blue
En lo que va de 2023, el dólar blue acumula una suba de $137 después de cerrar el 2022 a $346.
Durante 2022 el dólar informal avanzó $138 (+66,4%) después de cerrar el 2021 en los $208.
Pero en 2021, el dólar blue registró un alza de 25,3% ($42), la mitad respecto de la inflación del período (50,9%). No obstante, vale recordar que en 2020 había mostrado un brusco salto de 111% (frente a una inflación de 36%).
Cabe recordar que el dólar informal subió $2 en octubre (+0,7%) después de bajar en septiembre, al registrar una merma de $2 (-0,7%). Recordemos que en agosto había cedido $6 (-2%).
En el séptimo mes del año, el dólar paralelo había trepado $58 (+24,4%), lo que representa hasta el momento su mayor avance mensual en el año.
Previamente, había aumentado $31 (+15%) en junio, luego de subir en mayo $6,50 ( 3,2%).
El dólar paralelo aumentó 50 centavos en abril, y cedió $11 en marzo, su peor performance en 14 meses. En febrero pasado, bajó $6,50 (-3%), después de ascender en enero $5 ó 2,4%.
¿Qué es el dólar blue?
La venta del DÓLAR BLUE es solo en el mercado paralelo, el informal, donde los límites y precios se acuerdan entre las personas, con una valor de referencia pero que podría ser diferente cuando se va a una «cueva» a comprar o a vender. No tiene límites como el oficial.
¿Desde cuándo existe y por qué se llama dólar blue?
Hay varias explicaciones: una refiere sobre su denominación marcando que se llama así porque en inglés, «blue», además de nombrar al color azul, remite a algo «oscuro».
Otra afirma que se lo relaciona con las operaciones de compra a través de bonos o acciones de compañías conocidas como «blue chips». También lo vinculan con el color aproximado que aparece cuando se aplica un fibrón para detectar billetes falsos.