Un violento episodio familiar con intervención policial se registró en la madrugada de este viernes en la intersección de avenida Vélez Sarsfield y calle Francia, donde un hombre de 54 años fue detenido por amenazar con un arma de fuego a su hija y a sus nietos menores de edad, en un hecho que generó alarma en la zona y motivó una rápida respuesta policial.
El operativo comenzó alrededor de la 1:00, cuando un llamado de emergencia alertó sobre un supuesto desorden con arma de fuego. Al llegar al lugar, personal de la Comisaría Octava observó a dos sujetos señalados por testigos presenciales, quienes al notar la presencia policial intentaron darse a la fuga internándose en un sector de monte cercano, pero fueron rápidamente reducidos y demorados.
Los detenidos fueron identificados como J. C. V., de 54 años, con domicilio en la misma zona del hecho, y A. N. G., de 35 años, residente en calle Gobernador Bosch. En poder de Vallejos se secuestró un revólver calibre .22 largo, marca Jaguar, con capacidad para 10 alveolos, cargado con tres municiones, una de ellas ya detonada.
La denuncia fue realizada por G. I. P., de 55 años, ex pareja de Vallejos, quien relató que su hija, M. E. V., había sido amenazada con un arma de fuego por su padre, y que también sus nietos fueron víctimas del hecho. Según testimonios recabados, Vallejos apuntó a su hija y a su nieta de 14 años, X. C. A., y luego habría realizado varios disparos intimidatorios hacia una laguna cercana al domicilio.
El hecho fue caratulado como “Supuesto abuso y amenazas con arma de fuego”, quedando Vallejos aprehendido por disposición de la Fiscalía N°3 a cargo de la Dra. Soto, mientras que Gamarra fue puesto a disposición del Juzgado de Faltas local.
En el lugar se labró el acta de constatación y el arma quedó bajo resguardo para su análisis pericial. El procedimiento estuvo a cargo del Oficial Principal Gastón Emanuel Báez, de servicio en la Comisaría Octava Capital.
La investigación continúa para determinar si existen antecedentes de violencia previos por parte del agresor, y si el arma secuestrada se encuentra registrada legalmente.