El empresario chaqueño se refirió a la Ley de Blanqueo para la Construcción y sostuvo que las expectativas son muy altas. Aseguró que mientras haya obra pública y privada “va a haber empleo”.
Marcelo Andreatta, habló con Chaco Tv sobre la reactivación de la construcción y sobre la Ley de Blanqueo. El empresario destacó las ayudas que reciben las empresas por parte del Gobierno Nacional para regularizar la situación de las y los trabajadores. “Hay distintas ayudas a las empresas en cuanto a las reducciones de lo que tenemos que pagar de las contribuciones”, señaló.
En relación a la Ley de Blanqueo, que busca activar de manera específica al sector de la construcción con incentivos impositivos para quienes declaren bienes, e incluye parte del programa “puente al empleo” referido a la conversión de los planes sociales en trabajo genuino, Andreatta recordó la situación que se daba durante el gobierno de Nestor Kirchner.
Dijo que “las primeras obras de vivienda salieron en el 2004 y el gran problema que había era que la gente no quería blaquearse porque no quería perder lo único que seguro que tenía”, dijo y añadió “recordemos que veníamos de la crisis del 2001”.
En este sentido, el empresario sostuvo que no había confianza en que las obras públicas fueran a terminarse y aseguró que hoy “la gente quiere un recibo de sueldo”. “Decir que la gente no quiere trabajar es estigmatizar a los pobres”, enfatizó.
Andreatta dijo que “todo lo que sea para mejorar el empleo depende de una cuestión: que haya obras. En la medida en que haya obra privada y pública, se va a seguir tomando personal”.
Además, recordó la premisa del gobernador Jorge Capitanich, de llegar al récord histórico en puestos de trabajo. “El gobernador tiene la idea de llegar a 20 mil”, indicó.
“En lo que respecta hasta diciembre del 2023, las expectativas no son buenas, son gigantes”, aseveró y enumeró las obras que se están llevando a cabo en todo el territorio provincial.
“Las expectativas son enormes, ojalá que en el 2023 no volvamos a tener un gobierno estrictamente financiero que se olvida de la industria y la producción en la Argentina”, concluyó.