Aryna Sabalenka cayó ante Madison Keys, quien se coronó en el Abierto de Australia

La estadounidense se impuso por 6-3, 2-6 y 7-5, tras dos horas y dos minutos de juego. De esta manera, logró su primer título de Grand Slam.

Madison Keys es la nueva reina del Australian Open. La estadounidense luchó ante Aryna Sabalenka (1ª del ranking WTA) para quedarse con su primera consagración de Grand Slam por 6-3, 2-6 y 7-5 luego de 2 horas de partido.

La tenista de Illinois (Estados Unidos), que privó a Sabalenka de ganar su tercera corona consecutiva en el primer grande de la temporada, se convirtió a los 29 años de edad en la cuarta jugadora más veterana en conseguir su primer título Grand Slam, por detrás de la italiana Flavia Pennetta (US Open con 33 años), la británica Ann Jones (Wimbledon con 30 años) y la italiana Francesca Schiavone (Roland Garros con 29 años).

La campeona de la edición de 2025 ascenderá en la clasificación WTA hasta la séptima posición después de superar los fantasmas de los últimos ocho años, que le acompañaron tras aquella dura derrota en la final de Flushing Meadows en 2017, frente a su compatriota Sloane Stephens, por un severo 6-3 y 6-0.

Además, pasó a ser la primera en derrotar a la uno y la dos del mundo en un Grand Slam desde Svetlana Kuznetsova en Roland Garros 2009 y la primera en el Australian Open desde Serena Williams en 2005.

También, y como muestra de su gran comienzo de año, se posicionó como primera en ganar sus primeros 5 partidos vs. Top 10 en una temporada desde Serena Williams en 2014.

Obviamente que he pensado en aquel partido infinidad de veces en los últimos ocho años. Pienso que durante ese partido me consumieron los nervios, el momento, la oportunidad y todo esto. No pude darme la oportunidad de jugar», había dicho en la rueda de prensa posterior a su victoria en semifinales ante la polaca Iga Swiatek (2).

El inicio de Keys fue arrollador y cumplió con la sensata conclusión que extrajo de aquel fatídico tropiezo en la final del US Open de 2017 frente a su compatriota Sloane Stephens. La tenista de Illinois había comentado que en lugar de intentar no ponerse nerviosa, su objetivo pasaría por aceptar esos nervios y aprender a convivir con ellos. Desesperó a la número uno mundial con una implacable derecha y un inteligente tenis, que abarcaba desde reveses paralelos imprevisibles, hasta dejadas que esbozaron una sonrisa cargada de desesperación en el rostro de la vigente campeona.