Esas muertes se suman a las 15 personas fallecidas en los estados de Arkansas, Misisipi y Alabama, en el sur, y en Indiana e Illinois, en el centro-oeste estadounidense.
El número de muertos por las fuertes tormentas y tornados que golpean el sur y el centro-este de Estados Unidos, se elevó hoy a 26, según los últimos balances de las autoridades locales que estiman los heridos en centenares.
El estado de Tennessee, uno de los más afectados desde el inicio de las inclemencias el viernes, registró un alza de fallecidos de siete a nueves por incidentes relacionados con este fenómeno climático en el condado de McNairy, en el este de Memphis, según el canal de noticias de esta ciudad WREG citado por la agencia AFP.
Escenas de devastación quedaron en el camino del tornado por este distrito, donde retorció árboles y arrasó casas. «Podía sentir toda la casa temblando», dijo Janice Pieterick, cuya casa vio puertas y ventanas de vidrio explotar cuando el tornado arrasó el condado de Lewis. «Todos nos acurrucamos», confesó.
Esas muertes se suman a las 15 personas fallecidas en los estados de Arkansas, Misisipi y Alabama, en el sur, y en Indiana e Illinois, en el centro-oeste estadounidense.
Se generaron múltiples tornados, algunos de tamaño y poder excepcionales, que entre otros arrasaron partes del estado de Arkansas. Al menos cinco personas murieron allí, según informó la gobernadora, Sarah Huckabee Sanders, quien había declarado el estado de emergencia general y movilizó a la Guardia Nacional.
La capital Little Rock resultó fuertemente golpeada y el sábado sus habitantes despertaron con un panorama sombrío de coches volcados, enormes árboles arrancados del suelo, líneas telefónicas rotas y casas destrozadas. «Sabemos que muchas personas tuvieron que desplazarse y están buscando refugio», señaló el alcalde de Little Rock, Frank Scott Jr.
A su vez, la ciudad de Wynne, en el noreste del estado, está «cortada en d