El Colo dejará de ser jugador de Colo Colo al quedar libre en enero, y el Consejo de Fútbol ya lo contactó para sumarlo al plantel xeneize en un año clave.
Mientras Boca transita el cierre de una intensa temporada, el Consejo de Fútbol (CdF) trabaja en la planificación del equipo para 2025. Una de las prioridades es reforzar el mediocampo central tras la partida confirmada de Pol Fernández. En este contexto, Leonardo «el Colo» Gil, actual jugador de Colo Colo, aparece como el principal apuntado para sumarse al plantel dirigido por Fernando Gago.
Gil, de destacada trayectoria en el fútbol chileno y exjugador de Estudiantes de La Plata, se ha consolidado como una pieza clave en el mediocampo del conjunto trasandino. Con la decisión de no renovar su contrato, el jugador quedará libre en enero, lo que lo convierte en una opción atractiva para Boca.
Según trascendió, el CdF ya se comunicó con el mediocampista para manifestarle su interés, aunque también hay ofertas de clubes brasileños que podrían complicar su arribo al equipo argentino. El técnico Fernando Gago ha dejado en claro la necesidad de reforzar el mediocampo, especialmente con un jugador de experiencia que pueda complementarse con las jóvenes promesas del plantel.
Durante los últimos encuentros, Boca ha probado a Ignacio Miramón y Tomás Belmonte en la posición de volante central, pero ninguno logró consolidarse como titular indiscutido. Gil, con su recorrido y versatilidad, podría ser el equilibrio que el entrenador busca para enfrentar los desafíos del próximo año, que incluyen la Copa Libertadores y el Mundial de Clubes.
Además del mediocampo, la dirigencia planea reforzar otros sectores del equipo: entre las prioridades están la incorporación de un arquero, ante la probable salida de Javier García; un defensor central zurdo, dado que Nicolás Valentini se irá libre; y jugadores ofensivos, como un enganche creativo y un extremo. El chileno Carlos Palacios es uno de los nombres mencionados para reforzar el ataque.
El mercado de pases promete ser activo y estratégico para Boca, que apunta a armar un plantel competitivo para el 2025. La llegada de Gil sería un paso importante en esa dirección, aunque las negociaciones aún están abiertas y podrían definirse en las próximas semanas.