Los acusados tienen entre 15 y 17 años, oriundos de los barrios San Marcos y «La Olla», y forman parte de una banda delictiva. Las víctimas, tras la golpiza y el robo, se presentaron a la comisaría a denunciar y presentaban lesiones en sus cuerpos y rostros.
Un violento ataque contra dos menores terminó con la detención de otros ocho adolescentes que los había atacado a gomerazos a piñas y patadas, para robarles dinero y sus celulares. Se trata de otro ataque «piraña» de similares características. En poder de los jovencitos, la Policía incautó gomeros, recortes de plomo y bolitas de vidrio, con los que agredían a automovilistas y transeúntes para perpetrar los atracos.
El procedimiento lo concretó personal del GRIM 4 de la Policía Provincial, cuando fue advertido por varios automovilistas del movimiento de al menos 10 jovencitos que atacaban a todo el que pasara por su lado, los robaban y amenazaban con gomeras. Los efectivos estaban despejando la salida de un matiné unas cuadras más adelante, por lo que de inmediato acudieron al punto señalado y localizaron a las «pirañas», quienes al ver llegar a los motorizados de la fuerza, pretendieron darse a la fuga en todas direcciones, pero ocho de ellos fueron demorados y arrestados.
Según informó la Policía, todos los demorados son menores de entre 15 y 17 años, quienes portaban entre sus pertenencias gomeras de fabricación casera, recortes de plomo y de hierro; así como también bolitas de vidrio, que usaban como proyectiles. También tenían entre sus pertenencias dos teléfonos celulares y alrededor de $108.000 en efectivo que era parte del dinero que unos minutos antes habían sustraído a dos chicos a los que atacaron a golpes de puño y patadas, y también a otras víctimas que huyeron del lugar.
La demora fue por avenida Raúl Alfonsín y calle Resoagli en el barrio Villa García, de la cual también colaboró personal de la comisaría Quinta, donde trasladaron a todos los menores. Más tarde, por orden de la Justicia, fueron entregados a sus tutores legales. «La utilización de recortes de plomo o hierro, como proyectil de estas gomeras caseras, puede resultar letal en caso de que la víctima reciba un impacto en la cabeza, ya que por el peso y la velocidad, el daño que causa es gravísimo», indicó a un alto jefe de la fuerza.
Al mismo tiempo, también llegaron a la comisaría los dos menores que habían sido víctimas de los bandidos. Ambos presentaban lesiones en sus rostros y distintas partes del cuerpo, producto de la golpiza recibida y, reconocieron entre los objetos secuestrados a los delincuentes, sus dos celulares robados, así como el dinero que le habían sustraído.