Thomas Hidalgo Alarcón jugaba frente a su casa y quedó en medio de una balacera entre bandas de delincuentes.
Thomas Hidalgo Alarcón jugaba en la vereda de su casa en Bernal Oeste, cuando quedó en medio de un enfrentamiento entre bandas y una bala impactó a la altura del corazón.
El trágico hecho ocurrió el viernes cerca de las 21, frente a una propiedad ubicada sobre la calle 176 y Misiones. Mientras el nene estaba jugando, pasaron dos motos con cuatro jóvenes a bordo, que se estaban persiguiendo y tiroteándose.
Luego de herir al nene, la moto blanca pasó por la comisaría séptima de Quilmes, y comenzó una persecución, que contó con la colaboración de la División Motorizada. En tanto, la madre del niño, al ver a su hijo gravemente herido, lo lleva rápidamente a la Unidad de Pronta Atención (UPA), donde fallece antes de ser derivado al Hospital El Cruce, en Florencio Varela.
Según reveló un testigo del hecho, primero vio pasar una moto negra y luego a una moto Honda Twister 250 color blanca, el acompañante de ese vehículo comenzó a disparar y una de las balas dio en el pecho de la víctima de 10 años.
A las pocas cuadras, los jóvenes que huían de la Policía, perdieron el control de la Honda, se subieron a la vereda y chocaron con un pilote de cemento y en ese momento fueron detenidos e identificados como Sebastián Nahuel Ruiz y Joel Pogonza, ambos de 18 años. Luego se comprobó que la moto en la que se trasladaban los detenidos había sido robada un día atrás, según informó Infobae.
Ambos quedaron a disposición de la fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 del Departamento Judicial de Quilmes, Karina Gallo, quien ordenó un dermotest para ambos y el peritaje de un revólver calibre 32, sin marca ni número de numeración visible, que fue hallado sobre la calle Pilcomayo y calle 170.