El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, reconoció negociaciones para la construcción de un gasoducto entre Brasil y Vaca Muerta (Neuquén), que pasará por Corrientes y se conectará a través de Paso de los Libres Uruguayana.
Brasil está negociando con Argentina para permitir la construcción de un gasoducto para traer gas de las reservas de Vaca Muerta, así lo reveló el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, citando alternativas buscadas por el gobierno para reducir el valor del insumo.
“Estamos en negociaciones con Argentina. Gas de Vaca Muerta. Saldrá algún día, porque no es fácil empezar a importar gas, crear, construir ductos”, insistió Bolsonaro en una de sus rutinarias transmisiones en vivo, desde la red social Facebook.
Junto con las declaraciones del presidente de Brasil, la agencia Reuters aclaró que existen conversaciones entre los dos países para la construcción del gasoducto, pero aún se busca financiamiento para el proyecto de miles de millones de dólares.
Sin embargo, creen que hay poco interés de los empresarios industriales de Porto Alegre y San Pablo, pese a que su costo de abastecimiento es cerca de 3 veces más caro que en Argentina.
«Está pendiente una misión a San Pablo, que se suspendió por el coronavirus. Queremos llevar a los productores como YPF, Pan American Energy (PAE), Total Austral y Compañía General de Combustibles (CGC), entre otros, para hacer una ronda de negocios con potenciales compradores del gas», indicaron fuentes oficiales.
El embajador en Brasil Daniel Scioli había adelantado el año pasado que este proyecto de construir un gasoducto estaba en la mira: «Estamos en la etapa exploratoria ahora. Existe la voluntad de ambos gobiernos de avanzar con el proyecto». Y había dicho a la revista brasileña Valor Económico: «Este es nuestro gran proyecto binacional. Brasil necesita el gas y nosotros necesitamos los mercados y las inversiones».
Financiar el proyecto, según ese medio brasileño, costaría unos u$s 3700 millones para la Argentina y otros u$s 1.200 millones para Brasil.
Según el diario El Economista, el año pasado la compañía energética argentina Saesa adquirió la central térmica Uruguaiana, en el sur de Brasil, para generar allí una salida a una parte del gas de Vaca Muerta, que en los meses templados no tiene un comprador asegurado.
El aprovisionamiento para esa usina se realizará mediante el gasoducto de Transportadora de Gas del Norte (TGN) que conecta Vaca Muerta con la Central Térmica Uruguaiana (CTU), cruzando la frontera.
La propuesta argentina apunta a la ampliar la capacidad de transporte del gas por un gasoducto entre la formación de Vaca Muerta, en la provincia de Neuquén, que recorrerá 1430 kilómetros hasta la frontera con Brasil a la altura de la ciudad de Paso de los Libres, en la provincia de Corrientes.
El tramo Uruguayana-Porto Alegre, en el estado de Río Grande de Sol, en tanto, demandará casi 600 kilómetros de extensión y se calcula de manera preliminar requerirá de inversiones en torno a u$s 1200 millones, que deberían ser responsaiblidad del gobierno brasileño, consignó Valor.