La medida del Juzgado Federal de Presidencia Roque Sáenz Peña recayó sobre Gabriel Morón y su mujer, Gladys Peregal; se trata del caso donde había sido condenado el fallecido abogado Carlos Salvatore.
“Dejar sentado que el presente proceso no afecta el buen nombre y honor del que hubieren gozado las personas que han de resultar sobreseídas”. Así, el juez federal de Presidencia Roque Sáenz Peña, Miguel Aranda, se refería al empresario Gabriel Morón y su esposa, Gladys Peregal, en una resolución donde los sobreseyó del delito de lavado de dinero provenientes del narcotráfico, un expediente derivado de la investigación conocida como Carbón Blanco, que dejó al descubierto la actividad de una organización criminal que enviaba hacia Portugal y España cargamentos de cocaína camuflados en bolsas de carbón vegetal desde Quitilipi, Chaco.
En 2015 hubo fuertes condenadas a los líderes de la banda. El abogado Carlos Salvatore y el empresario futbolístico Patricio Gorosito recibieron penas de 21 y 19 años, respectivamente. Ambos murieron cuando cumplían sus sentencias.
En 2019 hubo condenas de hasta nueve años de cárcel por lavado de activos. Además, el TOF de Resistencia dispuso el decomiso de los bienes provenientes de esa causa. La medida fue ordenada tras el pedido del fiscal general Federico Carniel, de la Dirección General de Recuperación de Activos y Decomiso de Bienes de la Procuración General, y de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac).
En septiembre pasado, la Agencia de Administración de Bienes del Estado, a cargo de Martín Cosentino, decidió subastar una de las propiedades que poseía Salvatore, ubicada a 400 metros de la estación Belgrano R del ferrocarril Mitre. La familia Salvatore vivió 15 años en esa casa.
Fuente: La Nación.