El fin de semana extralargo de Carnaval reafirmó su rol como un motor clave para el turismo en Argentina, con 2,8 millones de personas movilizándose por distintos puntos del país , lo que representó un incremento del 7,6% respecto al año anterior. Los datos se desprenden de un informe publicado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
A lo largo del territorio nacional, la actividad mostró una dinámica variada, con provincias que superaron las expectativas de afluencia y otras donde el movimiento se mantuvo dentro de lo previsto. En muchas localidades, la combinación de carnavales, atractivos naturales y una oferta turística consolidada atrajo a miles de visitantes, generando un fuerte impacto en sectores como la hotelería, la gastronomía y el transporte.
Las provincias con mayor tradición carnavalera, como Corrientes, Entre Ríos y Jujuy, registraron una alta concurrencia en sus festividades . En Gualeguaychú, las comparsas desfilaron ante un público multitudinario, mientras que, en la Quebrada de Humahuaca, las celebraciones mantuvieron su nivel de convocatoria habitual, con una notable ocupación hotelera en la región.
El impacto económico del feriado alcanzó los $701.064 millones, con un gasto promedio diario de $89.167 , reflejando un aumento real del 33,8% en comparación con 2024.
La estadía promedio se situó en 2,8 días, en línea con tendencias previas y evidenciando una distribución homogénea de visitantes en los distintos puntos.
A pesar de algunas reprogramaciones puntuales, debido a lluvias en regiones del centro y el Litoral, la actividad turística logró sostenerse con altos niveles de ocupación en numerosas localidades del país.
El Carnaval 2025 en Argentina mostró una fuerte recuperación del turismo, con provincias como Entre Ríos, Jujuy, Mendoza y Corrientes liderando la ocupación hotelera.
Las ciudades con tradición carnavalera lograron mantener su protagonismo, con celebraciones masivas en Gualeguaychú, Corrientes y Tilcara, atrayendo miles de turistas y dinamizando la economía local.
Las malas condiciones climáticas afectaron algunas festividades, especialmente en Ciudad de Buenos Aires y Entre Ríos, donde las lluvias intermitentes obligaron a la reprogramación de algunos encuentros. Sin embargo, en la mayoría de las provincias, las actividades se desarrollaron con normalidad.
El turismo interno fue el gran impulsor del movimiento, con muchos viajeros optando por escapadas cortas de entre 2 y 3 noches. La tendencia se reflejó en distritos como Buenos Aires, Córdoba y Tucumán, donde los residentes prefirieron trasladarse a destinos cercanos en vez de permanecer en las capitales.
BALANCE DEL TURISMO CHAQUEÑO
La provincia tuvo una ocupación promedio del 44% , con diferencias entre regiones: en el Litoral, el hospedaje alcanzó el 64%, mientras que en el Centro-Sudoeste fue del 48%, mientras en El Impenetrable apenas del 20%. La estadía promedio fue de 2 días, con un gasto estimado en $60.000, siempre por día y por persona, abarcando alojamiento, comidas y traslados.
Las celebraciones estuvieron marcadas por encuentros en distintas localidades. En Resistencia, se celebró la Fiesta Municipal del Carnaval, con desfiles de comparsas y la presentación de Abel Pintos, uno de los artistas más convocantes del país. Además, en Resistencia se realizó la Feria del Libro Chacu Guaraní, una cita paralela al carnaval que promovió la cultura local y generó movimiento turístico en la capital.
En tanto, en Las Breñas los corsos atrajeron a cientos de espectadores, mientras que en Napenay, las festividades se extendieron por tres días consecutivos. Por su parte, en Las Palmas, los Carnavales de la Dulzura ofrecieron espectáculos con comparsas, batucadas y presentaciones artísticas que resaltaron la identidad cultural de la región.
A pesar de algunas lluvias intermitentes en la región, la agenda se desarrolló con normalidad y la provincia vivió un carnaval con una notable oferta de espectáculos y actividades recreativas.