Caso Thiago Correa: imputaron al policía por homicidio con dolo eventual

La Fiscalía de Homicidios de La Matanza imputó este domingo al agente de la Policía Federal Argentina (PFA) Facundo Aguilar Fajardo, de 21 años, por el homicidio con dolo eventual de Thiago Correa, el niño de 7 años que recibió un balazo en la cabeza el miércoles pasado durante un tiroteo en Ciudad Evita. El menor se encontraba con su padre esperando el colectivo cuando fue alcanzado por un proyectil a unos 180 metros del lugar donde ocurrió el enfrentamiento entre Fajardo y un grupo de delincuentes.

El fiscal a cargo de la investigación decidió imputar al efectivo bajo la figura de dolo eventual, descartando la carátula de homicidio culposo. Según fuentes judiciales, esta decisión se basó en el contexto del hecho: Fajardo disparó 11 veces con su arma reglamentaria en una avenida pública, en horario todavía transitado. La fiscalía considera que el agente pudo prever el resultado de su accionar y, sin embargo, eligió continuar con los disparos, asumiendo el riesgo de provocar una muerte.

“El policía corrió el riesgo de matar sabiendo que lo estaba haciendo”, explicaron voceros del caso, al detallar los fundamentos de la imputación.

La diferencia entre homicidio culposo y dolo eventual radica en la intención o la previsibilidad del resultado: en el primero, no hay voluntad ni aceptación de provocar una muerte, pero esta ocurre por negligencia o imprudencia; en el segundo, el autor no busca el desenlace fatal, pero acepta la posibilidad de que suceda.

Otra imputación: exceso en la legítima defensa

Además, Aguilar Fajardo será indagado este lunes por exceso en la legítima defensa en relación con la muerte de Brandon Corpus Antelo, uno de los cuatro delincuentes que lo abordaron en la parada de colectivo ubicada a metros de su casa. Las pericias y cámaras de seguridad indican que Fajardo disparó a los asaltantes mientras estaban en fuga y de espaldas, por lo que la fiscalía interpreta que el peligro había cesado al momento de accionar el arma.

Aun así, el fiscal consideró atenuantes: la situación de riesgo inicial y la amenaza de muerte hacia el efectivo y su madre. Por ese motivo, no se formuló una imputación más grave, aunque la investigación sigue en curso y las calificaciones podrían modificarse con nuevas pruebas.

Declaraciones oficiales y postura del Gobierno

Antes de que se conociera el fallecimiento de Thiago, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, brindó una conferencia de prensa en la que respaldó públicamente al agente policial y responsabilizó directamente a los delincuentes por el trágico desenlace.

“La causa por la que Thiago está en esa condición es porque estos cuatro delincuentes salieron a robarle la vida. La acción de Facundo es una de legítima defensa”, expresó la funcionaria, quien además pidió que la causa contra los asaltantes sea recaratulada como tentativa de homicidio.

Bullrich también aseguró que el agente estaba en condiciones de utilizar su arma y subrayó su entrenamiento en la fuerza. “Nadie que no esté preparado lleva un arma. Está claro que tenía las condiciones concretas de tiro para evitar que esos delincuentes se fugaran impunemente”, afirmó.

El hecho

El episodio tuvo lugar el miércoles por la noche, alrededor de las 22:30, en la intersección de avenida Crovara y Madrid, en Ciudad Evita. Allí, Fajardo fue abordado por cuatro delincuentes armados. En respuesta, extrajo su arma reglamentaria y comenzó a disparar. En el tiroteo, Corpus Antelo, de 18 años, murió tras recibir un disparo en el cuello. Otros dos jóvenes, Uriel Alexis Montenovo y Uriel Emanuel Leiva, de 21 años, resultaron heridos —uno en la pierna y otro en el abdomen, en estado grave—. El cuarto sospechoso logró escapar.

Durante las pericias, se hallaron en el lugar un revólver calibre .38 sin numeración ni municiones, una vaina servida, un proyectil deformado y rastros de sangre de Thiago.

El estado de la causa

La imputación contra Aguilar Fajardo es inicial y podría modificarse a medida que avance la investigación, aclararon desde la fiscalía. También recordaron que esta calificación no es vinculante para el juez de Garantías, quien podría interpretar el hecho de manera diferente.

En paralelo, la conmoción por la muerte de Thiago generó reacciones públicas y movilizaciones. Mientras el sistema judicial analiza las responsabilidades penales, el caso ya abrió un nuevo capítulo en el debate sobre el uso de armas por parte de las fuerzas de seguridad y los límites de la legítima defensa.