Lanús fue muy superior en la mayor parte del primer tiempo, cuando hizo circular mejor la pelota y salió en velocidad por la derecha con el tándem D Plácido-Angel González, por donde crearon las dos llegadas más claras de la etapa.
A los 12 minutos González le metió un sombrero a Komar y habilitó por la derecha del área a Varaldo, quien gambeteó al arquero Servio pero estrelló su derechazo en el poste izquierdo. Y a los 18 el propio González volvió a ganar por la derecha, aunque esta vez Servio salvó al córner, con un pie, en el primer palo.
Central fue la antítesis en esa primera media hora inicial porque marcó mal por la izquierda de su mediocampo, donde ni Benítez ni Ferreyra podían con las proyecciones de Di Plácido y González. Además, hubo jugadas en las que el equipo local intentó jugar por abajo, la perdió y quedó muy abierto.
Recién a los 29 minutos Blanco metió un buen centro desde la izquierda, que Véliz cabeceó muy alto, lanzado en palomita, y en el cuarto de hora final Central logró presionar a Lanús en su campo y llegar con peligro, pero sobre todo dejó de sufrir como en casi toda la etapa inicial .
Así, a los 40 minutos Gamba asistió a Ferreyra por la izquierda del área, quien ganó y metió un derechazo, pero a las manos de Monetti. Y a los 43 minutos Walter Montoya, que jugó mejor en la recuperación, empalmó una volea de derecha que pasó cerca del travesaño.
El complemento fue otro partido porque Central presionó alto hasta los 5 minutos, cuando Marcelo Benítez pisó en el estómago al defensor Matías Pérez, tras un forcejeo, en una falta en la que actuó en forma irresponsable y fue bien expulsado por el árbitro Pablo Dóvalo.
Somoza acertó con el ingreso del lateral izquierdo Nazareno Romero por Gamba y el juvenil ex Vélez fue la grata sorpresa cuando se paró de doble 5 a la izquierda de Yacob y terminó como una de las figuras de su equipo, junto al arquero Servio y al delantero Alejo Véliz.
Ahí comenzó otro encuentro, entre un Lanús que dispuso de la pelota pero no generó una sola llegada clara y un Central que quedó parado de contraataque, pero tampoco pudo armar una situación clara.
Central atraviesa un año muy particular porque el club vive en estado de asamblea permanente por las elecciones de octubre, pero sobre todo por el último puesto en el que terminó el equipo del «Kily» González, que Leandro Somoza no pudo evitar por la mala campaña de visitante, a pesar de la buena performance de local.
Como si Central no tuviera suficientes problemas adentro y afuera de la cancha, el enganche Emiliano Vecchio emigró del club luego de un mal semestre, «a priori» porque no está en los planes de Somoza, y además el goleador Marco Ruben «colgó los botines».
Así, entre el mejor comienzo de Lanús y la gran reacción de Central, que aguantó a pie firme casi todo el complemento con uno menos y con un equipo de pibes, armaron un emotivo empate que premió la actitud de los «canallas», con el conmovedor aliento de sus hinchas, que salvaron la ropa en un partido de esos que antes habrían perdido.