Uno de los rugbiers más complicados en el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa dejó en claro que no se hace cargo de nada.
Ciro Pertossi, uno de los ocho rugbiers imputados, rompió el silencio y declaró ante los jueces en los Tribunales de Dolores por el crimen de Fernando Báez Sosa.
«Quiero aclarar que esa patada no la doy, cuando veo a ‘ese chico’ (Fernando Báez Sosa) en el piso, la freno», indicó.
Después se refirió también a un audio enviado la madrugada del homicidio, a las 6.06, en el que se lo escucha decir “chicos, no se cuenta nada de esto a nadie”. Sobre eso indicó: “Ya había gente de Zárate que decía que nos habíamos peleado, yo digo eso porque no quería que mis padres se enteraran que nos habíamos peleado. Esto todo lo que voy a declarar”.
Una vez que Pertossi finalizó, el fiscal Juan Manuel Dávila empezó con las preguntas, pero el imputado aclaró que no iba a declarar más. “Ya respondí eso”, replicó el joven, que concluyó: “Lo que tenía que decir, ya lo dije”. De esta manera, fue a sentarse.
Acto seguido, en el momento de la declaración, la jueza manifestó queno tiene sentido seguir preguntando si el joven no va a contestar.
Se espera ahora el testimonio de Agustín Costa Shaw, psicólogo clínico que intervino en la investigación penal suplementaria, y que fue ofrecido en marzo de 2022 por la defensa, a cargo de Hugo Tomei, como testigo de parte en una pericia psicológica y psiquiátrica a la que finalmente los imputados no aceptaron someterse por falta de «confianza» en el proceso judicial.
Aquella negativa de los acusados a ese peritaje diez meses atrás desató este lunes un contrapunto entre Tomei y el particular damnificado, que puso en duda el valor del testimonio de Shaw.
La discrepancia respecto de la declaración o no de este testigo será resuelta hoy por los miembros del tribunal, indicaron fuentes cercanas a la causa.
El juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa -asesinado a golpe el 18 de enero de 2020 en Villa Gesell- entró en su etapa final. Este martes declaran madres y padres de cinco de los rugbiers imputados por la salvaje golpiza a la salida del boliche Le Brique. Tras la sorpresiva declaración de Máximo Thomsen, hay expectativa por si otro de los acusados rompe el silencio.