El homenaje se concretó por calle Teniente Ibáñez y Entre Ríos, luego de una marcha en la que nuevamente se volvió a exigir justicia por la muerte del joven de 18 años. Por el caso, hay 11 policías imputados por la supuesta comisión del delito de abandono de persona seguido de muerte.
Este sábado por la noche se llevó adelante una marcha de la antorcha que finalizó con el rezo de un rosario y la colación de una cruz (por calle Teniente Ibáñez y Entre Ríos) en nombre de Lautaro Rosé, el joven de 18 años que se ahogó en las aguas del río Paraná luego de que habría sido perseguido por la Policía de Corrientes.
La convocatoria, que se concretó bajo el lema «Otro mojón por la memoria», contó con la participación de familiares, amigos y allegados de Lautaro, que nuevamente reclamaron justicia por el caso en el cual están imputados 11 efectivos por la supuesta comisión del delito de abandono de persona seguido de muerte.
Esta es la segunda movilización que se desarrolla esta semana tras la muerte de Rosé, ya que el miércoles último cerca del 1000 personas macharon hasta la Jefatura de la Policía y frente al Ministerio de Seguridad. En ese encuentro, Juana María Luz Sotelo, madre de Lautaro, aseguró que «no voy a descansar hasta que haya justicia para mí hijo».
«Yo pedí que me devuelvan sano a mi hijo, no como me lo devolvieron», lamentó la mujer y pidió protección para los jóvenes. «Tengo hijos, nietos y pienso en los chicos del barrio también, yo les pedí a los policías de la comisaria de mi barrio que me ayuden a buscarle a mi hijo y se me rieron en la cara», relató la mujer.
En tanto, la jueza del Juzgado de Instrucción N° 3, Josefina González Cabañas, manifestó en la semana que pedirán «un número importante de declaraciones testimoniales» que se van estar iniciando la semana que viene, aseguró la magistrada.