Colombia realizó otra eutanasia en un paciente que no padecía una enfermedad terminal

Se trata de Martha Sepúlveda, a quien en septiembre le habían impedido morir dignamente aunque estaba autorizada. El procedimiento se llevó a cabo este sábado, a menos de 24 horas del practicado con Víctor Escobar.

“Lucho por descansar”. Martha Sepúlveda, una mujer colombiana con esclerosis lateral amiotrófica (ELA), consiguió este sábado ejercer su derecho a morir dignamente. En septiembre le habían cancelado la eutanasia a pocas horas de que se la fueran a practicar.

Sepúlveda falleció en las últimas horas a los 51 años en el Instituto Colombiano del Dolor (Incodol) en la ciudad de Medellín, después de una larga lucha para poder ejercer su derecho a morir dignamente: en Colombia esta práctica es legal desde 1997, aunque no se empezó a aplicar hasta 2015.

Horas antes de que le practicaran el proceso en septiembre, Incodol decidió cancelar el procedimiento al “contar con un concepto actualizado del estado de salud y evolución de la paciente” con el que “se define que no se cumple con el criterio de terminalidad como se había considerado”, según señaló en un comunicado.

Martha Sepulveda junto a su hijo Federico  (Foto: Twitter/Federico Redondo Sepulveda).

“Si es desde el plano espiritual, yo estoy totalmente tranquila (…) Cobarde seré, pero no quiero sufrir más, estoy cansada. Lucho por descansar”, decía la mujer en septiembre, y aseguraba que la certeza de morir le daba “tranquilidad”.

Luego de la cancelación, un juez de Medellín ordenó al centro médico volver a programar la eutanasia, “siempre y cuando esta (Sepúlveda) mantenga su voluntad de practicarlo”, y este sábado la entidad prestadora de salud dio la autorización y “se realizó el procedimiento”.

Víctor Escobar: el primer colombiano autorizado a recibir la eutanasia

La eutanasia de Martha Sepúlveda se produce tan solo un día después de que este viernes Víctor Escobar, de 60 años y quien padecía la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), diabetes e hipertensión, se convirtiese en el primer paciente no terminal de América Latina que recibe la eutanasia y tras haber tomado la decisión de tener “una muerte digna”.

Sepúlveda es, por lo tanto, la segunda persona sin una enfermedad en estado terminal en recibirla, después de que la Corte Constitucional lo autorizara el pasado julio para este tipo de pacientes.

Víctor Escobar, el primer colombiano en recibir la eutanasia sin ser un paciente terminal (Foto: Ivan Valencia / AP)

El fallo de julio de la Corte, que modifica el “homicidio por piedad” del Código Penal y que antes contemplaba penas de hasta 54 meses de prisión, anula ese primer requisito de que la persona que lo solicite padezca una enfermedad terminal, y lo hace motivado por las barreras que aún persisten en el país para ejercer este derecho.

Legal hace 25 años, pero plagada de trabas: la eutanasia en Colombia

Colombia fue el primer país de Latinoamérica en despenalizar la eutanasia y es uno de los pocos del mundo donde es legal después de que el Constitucional consagrara en 1997 la muerte digna como un derecho fundamental en caso de enfermedad terminal cuando el paciente sufriera de mucho dolor, lo solicitara de forma voluntaria y lo realizara un médico.

A pesar de que es legal desde 1997, no se comenzó a ejercer ese derecho hasta 2015 y los procedimientos aún enfrentan barreras, como que solo se realiza en determinadas ciudades y muchos centros médicos no saben cómo actuar.

En el país tan solo se han realizado 94 procedimientos de eutanasia desde abril de 2015 hasta el 8 de mayo de 2020, según el Ministerio de Salud, que cuenta los casos desde que se permitió el procedimiento.