Compró una moto por Facebook y cuando viajó para retirarla lo asesinaron de un balazo en la cabeza

Lautaro Leandro tenía 22 años y había viajado a Santa Fe para cerrar el trato que había arreglado previamente a través de las redes sociales. Cuando se encontró con los presuntos vendedores, hubo una discusión y uno de ellos le disparó.

Con la ilusión de poder tener una motocicleta, un joven de 22 años oriundo del partido bonaerense de Lomas de Zamora compró el rodado a través de la red social Facebook y viajó a la provincia de Santa Fe para retirarla, sin embargo, fue emboscado y baleado en la nuca, aunque horas más tarde murió como consecuencia de las heridas recibidas.

Fuentes policiales indicaron que la víctima se llamaba Lautaro Leandro, tenía 22 años y vivía con su familia en la localidad de Villa Fiorito, lo cierto, es que dejó Buenos Aires el domingo pasado con un auto, en el que lo acompañaban su hermano Lorenzo y una pareja amiga.

Cabe destacar, que Leandro había ofertado una Play Station como parte de pago a un hombre que le vendía una moto Honda Tornado de 250 centímetros cúbicos, pero el joven no llegó a entregarle la consola: antes recibió el disparo. 

“Hace como 15 días que quería ir, le insistíamos con la mamá que no lo hiciera. El viaje se pospuso hasta que, lamentablemente, se concretó”, dijo el padre de la víctima, Leonardo Leandro, en el sitio Aires de Santa Fe.

Tras la emboscada, el chico de 22 años fue trasladado al hospital Cullen de Santa Fe, donde permaneció internado en terapia intensiva durante unas horas hasta que murió.

“Mi hijo se bajó y cuando advirtió que las intenciones no eran convenientes, le pegó un grito a su hermano, que estaba al volante, para que se fuera. Él salió corriendo y le tiraron dos tiros: uno a la cabeza y el otro pegó en la PlayStation que tenía como parte de pago”, agregó su papá.

¿Cómo fue el asesinato?

Lorenzo, testigo del asesinato, contó en LT10: “Cuando nos citaron yo le dije a mi hermano que pasemos para ver más o menos el panorama. Él se bajó, reconoció a quienes habían negociado con él y empezó a charlar”.

“Después de hablar un rato, mi hermano me dijo que querían ir a probar la PlayStation a una casa. Yo ahí le dije que al auto no iban a subir. Tras ese cruce de palabras, él gritó: ‘Corran’. Y yo aceleré. Mi hermano le sacó como media cuadra y, cuando escucho los disparos, veo que cae desplomado por el espejo retrovisor”, lamentó.