Con la venia de Lasso, militares ingresaron a una cárcel de Ecuador tras una nueva matanza

Las Fuerzas Armadas dijeron que 1.500 soldados ingresaron a la penitenciaría de Guayaquil, la gran ciudad portuaria del suroeste del país, para retomar su control luego del enfrentamiento del fin de semana, que dejó también 11 heridos.

Al menos 31 reclusos murieron en un nuevo estallido de violencia carcelaria que se inició el sábado en Ecuador y se extendió hasta este martes, cuando cientos de militares y policías ingresaron a la penitenciaría de Guayaquil para retomar el control, horas después de que el presidente Guillermo Lasso decretara el estado de excepción por 60 días en todo el sistema penitenciario.

«Se eleva a 31 el número de fallecidos y a 14 el de heridos tras los enfrentamientos registrados desde el sábado al interior de la Penitenciaria del Litoral, en Guayaquil», informó esta tarde la Fiscalía en Twitter.

Más temprano, el organismo había reportado 18 muertos y 11 heridos, incluido entre estos últimos un policía.

En principio, el organismo que administra las prisiones (SNAI) había reportado el sábado «tres heridos leves» por un incidente en esa cárcel, también conocida como Guayas 1. Para el domingo, la entidad confirmó un enfrentamiento entre bandas criminales dentro de la prisión e informó de seis muertos y 11 heridos.

Hoy, un contingente de 2.700 uniformados, entre militares y policías, ingresaron a la penitenciaría para retomar el control. La intervención se produjo en el marco de un estado de excepción declarado en todo el sistema penitenciario por dos meses.

«El Estado pone orden en la Penitenciaria del Litoral porque la fuerza coercitiva jamás se doblegará», escribió el presidente Guillermo Lasso en su cuenta de la red social X, antes llamada Twitter.

El mandatario incluyó en su mensaje fotografías en las que se observa a militares fuertemente armados que custodian a decenas de presos en un patio. Los reclusos aparecen con el torso desnudo, unos sentados y otros acostados boca abajo, y con las manos atadas.

Los uniformados entraron a la cárcel de Guayas 1 «para restablecer el control en este centro penitenciario, mediante operaciones militares de control de armas, municiones y explosivos», dijo el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas en un comunicado.

«La misión es poder restablecer el orden en este centro de privación a fin de precautelar la vida, la salud, la seguridad de las personas privadas de la libertad», declaró más temprano a la prensa el general Nelson Proaño, comandante general de las FFAA.

De acuerdo con Proaño, un militar resultó herido a causa de una esquirla.

Luego del enfrentamiento en la cárcel de Guayaquil, reos de 13 prisiones de Ecuador iniciaron una huelga de hambre y tomaron de rehenes a 96 guardiacárceles para exigir mejoras en las condiciones de detención.

Las autoridades aún no informaron sobre la situación de 96 guías penitenciarios retenidos en cinco cárceles a raíz de los choques en la Guayas 1. Tampoco mencionaron a los presos que se declararon en huelga de hambre en 13 centros.

Afuera de la cárcel, un centenar de familiares de los reclusos esperaban noticias. Ambulancias y vehículos de la unidad de criminalística ingresaron al centro carcelario.

Según el decreto, publicado en la cuenta de redes sociales de la presidencia ecuatoriana, la Policía y las Fuerzas Armadas se desplegarán dentro de las prisiones para restablecer el orden y hacer frente a la violencia a manos de organizaciones criminales. Hoy, por cuarto día consecutivo, las autoridades reportaron detonaciones desde la Penitenciaria de Guayaquil, ubicada en la provincia de Guayas, horas antes de que los militares ingresaran al centro.