El PRO tiene en sus manos la suerte de la ley. Los cinco radicales «violetas», que quedaron en el ojo de la tormenta por haber cambiado sus votos en la ley jubilatoria, se van a juntar el lunes para definir una postura.
El bloque de diputados nacionales del PRO, que tiene 38 integrantes, va camino a una votación dividida el miércoles que viene en la sesión para insistir en la ley de financiamiento a universidades públicas, que el presidente Javier Milei vetó.
Los votos de la bancada que preside Cristian Ritondo son clave, y por estos días todas las miradas están puestas allí, ya que de la decisión de sus legisladores depende la suerte de la ley.
Para salvar el veto, el Gobierno necesita que la fuerza política amarilla se abroquele junto a La Libertad Avanza y otras bancadas aliadas para superar el tercio de los votos.
El primer aviso que hizo sonar las alertas en el oficialismo lo dio el diputado del PRO Álvaro González, quien confirmó que votará junto a la oposición a favor de darle mayor financiamiento a las universidades públicas.
“Yo creo en la educación pública, me formé en la educación pública, soy egresado de la Universidad Nacional del Litoral y me parece que el acceso al conocimiento es la oportunidad que tienen los más vulnerables para salir de esa situación”, argumentó el legislador, que responde a Horacio Rodríguez Larreta.
González ya había estado presente en la conferencia de prensa en la que un grupo de diputados convocó a movilizarse el miércoles pasado en el Congreso en reclamo de presupuesto para las universidades.
En la sesión del 15 de agosto, cuando la ley obtuvo media sanción, en el PRO hubo cuatro ausencias que no pasaron desapercibidas: el larretista Álvaro González, la porteña bullrichista Sabrina Ajmechet, el ex árbitro de fútbol cordobés Héctor «Coneja» Baldassi y el misionero Emmanuel Bianchetti.
Una influyente diputada del bloque amarillo a la que Noticias Argentinas tuvo acceso admitió que varios integrantes de su bloque coquetean con repetir ese accionar.
A estas horas, hay más dudas que certezas y esa incertidumbre genera ansiedad en el oficialismo.
Para colmo, el ex presidente Mauricio Macri se reunió con senadores del PRO y les transmitió que la educación pública es una bandera del partido que fundó y que actualmente preside.
Es decir, que el principal referente del PRO no está operando políticamente para alinear a la tropa a los intereses del Gobierno. Un dato que refleja el enfriamiento de su relación con Javier Milei.
Los que seguro van a votar con el Gobierno son los cinco diputados nacionales que responden a Patricia Bullrich.
Son Damián Arabia, Sabrina Ajmechet, Silvana Giudici, Laura Rodríguez Machado y Patricia Vásquez.
«Los bullrichistas van a acompañar el veto con los dos brazos y las dos piernas», indicaron a la Agencia Noticias Argentinas fuentes parlamentarias del PRO.
El resto de los diputados está sumergido en intensas deliberaciones. La X se terminará de despejar, probablemente, en la reunión de bloque del martes a las 18 hs.
Otro voto que se le escapará al oficialismo es del jefe del MID, Oscar Zago, que según pudo saber Noticias Argentinas, estará ausente por un viaje que ya tenía programado desde hace cuatro meses.
En el bloque de la UCR que encabeza Rodrigo de Loredo están trabajando para reducir las fugas que tuvieron en la votación de la ley jubilatoria, por las cuales la bancada del partido centenario quedó marcada como principal responsable de la derrota.
En aquella votación fueron cinco los diputados que se dieron vuelta: Mariano Campero, Martín Arjol, Luis Picat, Pablo Cervi y José Federico Tournier.
Según pudo saber Noticias Argentinas, estos mismos cinco se reunirán a solas el próximo lunes para fijar una postura.
Otros votos en duda son los de Nancy Picón Martínez y María de los Ángeles Moreno, del bloque aliado Producción y Trabajo.
Las dos sanjuaninas fueron parte de los “87 héroes” que Milei invitó a la Quinta de Olivos para festejar el freno a la mejora a los jubilados.
Sin embargo, en la sesión del 15 de agosto por en financiamiento universitario, ambas estuvieron ausentes, lo que abre un signo de interrogación preocupante para el oficialismo.
Tampoco estuvo en esa sesión la tucumana Gladys Medina, del bloque Independencia, otra de las “heroínas” para Milei.