Las actividades tendrán lugar a partir de las 9, y contarán con la presencia del gobernador Jorge Capitanich. En el marco de la conmemoración, el subsecretario de Planificación y Justicia, Leandro Álvarez, destacó el financiamiento conseguido por la provincia para la ejecución de la nueva unidad carcelaria y la incorporación de tecnología para la fuerza provincial.
El subsecretario de Planificación y Justicia del Ministerio de Seguridad y Justicia, Leandro Álvarez, invitó a la comunidad a participar de las actividades que se realizarán este martes en La Leonesa, en el marco del conmemoración del 69° aniversario de la Creación de la Policía de la Provincia del Chaco, que contarán con la presencia del gobernador Jorge Capitanich. En rigor, este 15 de junio, a partir de las 9, se concretará el acto central, pero las acciones se realizarán durante todo el mes y tienen como principal objetivo reconocer el trabajo del personal policial.
El subsecretario destacó además que el Banco Centroamericano aprobó recientemente el financiamiento para el Chaco por 25 millones de dólares, con el Estado Nacional como garante, destinado a la construcción de una unidad penitenciaria, además de portales de acceso a la provincia, para mejorar las condiciones edilicias y laborales de la Policía Caminera; e instalación de tecnología de última generación en Puerto Eva Perón, Basail y el puente Chaco-Corrientes, que son los puntos de mayor circulación de la provincia.
«La idea es renovar infraestructura, pero también tenemos como objetivo la adquisición de equipamiento porque vamos a comprar cuatro autombombas, destinadas al cuerpo de bomberos, un hito histórico porque viene a superar una carencia de años», aseguró Álvarez en declaraciones a Radio Provincia. En ese marco, consideró que «toda esta inversión y las acciones proyectadas van a traer una respuesta positiva a lo que hace al apartado de Seguridad».
Emergencia carcelaria
El funcionario consideró que la construcción de la nueva unidad carcelaria proyectada con el financiamiento asegurado por el Banco Centroamericano será fundamental para superar la «emergencia carcelaria y de bienes secuestrados» en la provincia. «Hoy estamos teniendo cerca de 3000 personas detenidas en lo que son comisarías y Servicio Penitenciario, una situación preocupante, y es por eso que la nueva unidad permitiría descomprimir el trabajo de la policía», aseguró.
En este sentido remarcó que un gran número de agentes policiales se encuentra imposibilitado de salir a hacer tareas de prevención o investigaciones por tener que custodiar a las personas detenidas en las comisarías, con la capacidad «totalmente superada». «Se viene llevando a cabo un trabajo con el Poder Judicial, la Defensoría, el Ministerio Público Fiscal, la Secretaría de Derechos Humanos y el Comité Contra la Tortura; que son actores que hacen el seguimiento de las acciones del Ministerio de Seguridad», planteó Álvarez.
La nueva unidad carcelaria se emplazará en Resistencia, en el predio de la Alcaidía, atento a que ya existe un esquema de infraestructura instalada. Se trata, en concreto, de nuevos módulos aprovechando los nuevos espacios sociale y la estructura de seguridad perimetral. Según las cifras oficiales, el 60% de la conflictividad penal se registra n el Gran Resistencia y eso fue fundamental a la hora de decidir el lugar de radicación de las futuras obras. Se estima que la nueva unidad permitirá sumar entre 700 y 1000 plazas a la capacidad actual.
La Acaidía de Resistencia, como la de Sáenz Peña, cuenta con una capacidad de 500 personas, pero en resto de las unidades de toda la provincia existen otras entre 300 y 400 plazas.
Trabajo interinstitucional
El funcionario destacó además la continuidad del trabajo que se viene realizando en conjunto con el Ministerio Público Fiscal que permite poner en común las situaciones cotidianas, en busca de mejorar el funcionamiento del sistema de justicis en beneficio de la comunidad. «Muchas veces, la gente queda en el medio de policías y fiscales, y por eso entendemos que es necesario unificar criterios y cuestiones de operatividad que hacen que, muchas veces, el que robó quede en libertad», analizó. Álvarez consideró que «hay muchos funcionarios nuevos, equipos de ayudantes fiscales y otros participantes que generan la necesidad de repensar lógicas de trabajo para saber a dónde estamos parados y qué necesitamos mejorar».