El Consejo de Seguridad Deportiva Provincial de Córdoba (Cosedepro) consideró hoy que el partido del próximo miércoles entre Talleres y Vélez -por el pase a semifinales de la Copa Libertadores- pasó a ser de «riesgo» e impedirá la presencia de los hinchas visitantes en el estadio Mario Alberto Kempes.
El titular del área que depende del Ministerio de Seguridad de Córdoba, Marcelo Frossasco, confirmó que no permitirá el público visitante en la revancha de los cuartos de final de la Libertadores, tras el triunfo de Vélez por 3-2 en Liniers.
En declaraciones al canal Doce de Córdoba, el funcionario de seguridad consideró que el partido pasó a ser de «riesgo» tras los incidentes que se produjeron en la ida, disputada en el estadio José Amalfitani.
«A esta hora lo que prima en el Consejo es que el partido del miércoles se juegue solamente con público local», señaló Frossasco.
Si Talleres da marcha atrás con la venta de entradas para el público visitante, la Conmebol podría aplicar una multa ya que por reglamento está obligado a ceder dos mil lugares.
«No sé si este instrumento es suficiente para que Conmebol los exima de la multa, pero tenemos la decisión de acompañar al club Talleres», concluyó el funcionario en sintonía con el presidente del club del barrio Jardín, Andrés Fassi, quien adelantó que tomará «medidas drásticas» luego de lo sucedido el miércoles por la noche con los hinchas en el estadio José Amalfitani.
En declaraciones a la radio Cadena 3, Fassi dijo esta mañana que los incidentes que se produjeron anoche en la platea Sur Alta involucraron a los «allegados, integrantes de la comisión directiva y familiares de los futbolistas» y no a los hinchas que estuvieron «infiltrados».
«El problema no fue con la gente que fue camuflada. Nos dieron 350 lugares para la comisión directiva y familiares y no hubo seguridad. Liberaron a la barra que pasaron seis o siete controles para llegar ahí. Fue una masacre», sostuvo Fassi, quien criticó con dureza a su par de Vélez, Sergio Rapisarda.