Corrientes: vecinos atraparon a tres ladrones y les dieron una feroz paliza en el barrio Pirayuí Nuevo

Un violento episodio de justicia por mano propia tuvo lugar este jueves en el barrio Pirayuí Nuevo de la ciudad de Corrientes, donde vecinos retuvieron y golpearon brutalmente a tres hombres acusados de cometer varios robos en viviendas de la zona. La intervención policial se dio en dos momentos distintos, en ambos casos para rescatar a los sospechosos de la furia vecinal.

El hecho se inició con un llamado al 911 que alertaba sobre dos individuos retenidos en la esquina de la canchita de fútbol «Milenium». Al llegar al lugar, efectivos de la Comisaría 20ª hallaron a Cristian Sebastián, alias «Colo», de 23 años, y a Axel Matías, alias «Caniche», de 22 años, ambos domiciliados en la zona de asentamiento del mismo barrio. Ambos presentaban evidentes signos de haber sido golpeados.

Los vecinos explicaron que los sujetos habían sido sorprendidos tras ingresar a distintas viviendas durante la madrugada y sustraer diversos objetos, entre ellos tres teléfonos celulares, cuatro camperas y un termo estilo sifón marca Stanley, de color gris y negro.

Mientras se formalizaban las denuncias correspondientes, la Policía recibió un nuevo aviso: un tercer sospechoso también había sido retenido por vecinos, nuevamente en la zona de la canchita. Al regresar al lugar, los agentes encontraron a José Andrés, alias «Andy», de 27 años, reducido en el suelo y con una herida sangrante en la cabeza, producto de la golpiza.

Debido a la gravedad de sus lesiones, el hombre fue trasladado al Centro de Atención Primaria de la Salud (C.A.P.S.) N° XV, en el mismo barrio, para recibir asistencia médica y resguardar su integridad física.

Con colaboración de vecinos (cuyas identidades no trascendieron), la Policía logró rastrear y recuperar la totalidad de los elementos robados, que se encontraban ocultos en distintas viviendas del asentamiento cercano.

El caso reabre el debate sobre la inseguridad y la creciente tendencia de justicia por mano propia, que pone en riesgo tanto a los sospechosos como a los mismos vecinos que deciden intervenir sin esperar la acción de las autoridades. La causa quedó en manos de la Justicia, que determinará los próximos pasos tanto respecto de los detenidos como del accionar de quienes participaron en las agresiones.