El designado secretario de Producción, José Ignacio de Mendiguren, afirmó hoy que “no hay nada técnico ni sólido que justifique los valores” de los tipos de cambio alternativos, y dijo que “hay que trabajar más en bajar el techo que en subir el piso”, a la vez que se mostró optimista por los niveles de exportación y la reducción de las importaciones de energía en los próximos meses.
“(El actual) no es un mal dólar, pero el problema está en cómo bajar la brecha (cambiaria). Es imposible trabajar con una brecha así porque, además, se presta a todo lo ilegal, que con mucha fuerza estamos combatiendo”, sostuvo de Mendiguren esta mañana en diálogo con El Destape Radio.
En ese sentido, el funcionario remarcó que “no hay nada técnico ni sólido que justifique los valores en los que están los otros dólares”.
“Creo que hay que trabajar más en bajar el techo que en subir el piso que todos sabemos que, cuando se hace de forma brusca, se traslada a inflación y erosiona el poder adquisitivo del salario que es el otro objetivo que el Gobierno quiere mantener, sino preguntémosle a (ex ministro de Economía, Alfonso) Prat Gay”, señaló el ex presidente del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) y de la Unión Industrial Argentina (UIA).
Consultado por una flexibilización en el acceso a las divisas para las empresas, de Mendiguren dijo que “en el corto plazo tenemos el problema de que los dólares no alcanzan” y que ello “es una realidad”, pero se mostró expectante por una mejora en la balanza comercial en los próximos meses.
“La diferencia es que hoy Argentina genera dólares. Este año vamos a estar con exportaciones de US$ 90.000 millones y creo que, a partir de septiembre, vamos a dejar de hacer los gastos en energía y tener un flujo distinto”, precisó.
En ese marco indicó que la Secretaria de Producción hará un “monitoreo día a día” con el Banco Central y la Secretaría de Comercio “para tener el menor daño posible”.
Respecto de los ejes fijados por el nuevo ministro de Economía, Sergio Massa, al área de Producción, de Mendiguren señaló que son “no permitir que caiga el nivel de actividad, dar horizontes claros hacia dónde se va en las distintas áreas, y promover la inversión y las exportaciones, sobre todo la de la pequeña y mediana (empresa) que, si bien no repercuten mucho en cifras, lo hacen en el empleo y la mejora de la productividad”.
Del mismo modo, consideró que, tras la salida de la crisis del Coronavirus, “ahora queda mantener el nivel (de actividad) y que derrame, porque el 10,5% de crecimiento no llegó”.
“Este Gobierno tiene que estabilizar una economía pero poniendo arriba de la mesa el preservar el poder adquisitivo de los salarios”, señaló el designado secretario en referencia al anuncio de un bono extraordinario de los jubilados, y a la convocatoria para el 18 de agosto del Consejo del Salario.
Asimismo, enfatizó sobre la necesidad de “cambiar la estructura productiva de la Argentina”.
“Si un país sigue exportando a granel su producción y no le da valor, servía cuando éramos cuatro millones de argentinos pero con 45 millones no se puede”, dijo de Mendiguren.
Como ejemplo, mencionó a la “economía del conocimiento”, a la cual prometió “darle impulso coordinándola con la industria tradicional”, además de “aprovechar las oportunidades que nos da el mundo sobre los recursos naturales, de petróleo y de gas, que hay que capitalizarlas para dar un salto al desarrollo definitivo”.