Investigadores e investigadoras del país están al frente del desarrollo de un test para detectar cáncer a través de un método económico y no invasivo: la extracción de una muestra de sangre. Los ensayos clínicos indican que tiene un 90% de sensibilidad y se espera que los primeros dispositivos entren en circulación en el sistema de salud argentino a fines del 2023, bajo el nombre de Oncoliq.
Radio UNNE dialogó con Adriana De Siervi, licenciada en Ciencias Biológicas y directora en el Instituto de Biología y Medicina Experimental (UBA-CONICET). Desde el 2014, esta investigadora lidera el desafío de dar con un método que colabore con el diagnóstico precoz de algunos de los tipos de cáncer con mayor incidencia en la población, el de próstata y el de mama.
“Nuestra tecnología se basa en la detección de moléculas microRNA, que se encuentran incrementadas en la sangre desde estadios tempranos de desarrollo tumoral. Para su identificación hemos desarrollando un método basado en biosensores moleculares ópticos”, explicó De Siervi.
Las microRNA se pueden medir, por lo que una muestra de sangre funciona a modo de biopsia líquida. Esta característica las hace muy útiles para ser empleadas como biomarcadores de diagnóstico e incrementar las posibilidades de sobrevida de los pacientes, al acceder de manera precoz a un tratamiento.
Para escalar el desarrollo y llevarlo al mercado, en el 2021 junto con Marina Simian, crearon una startup científica que se llama también Oncoliq. De Siervi aseguró que “este método de detección es escalable, de bajo costo, no tóxico y permitirá la detección en un laboratorio con equipo básico”.
En Argentina, según las estadísticas del Instituto Nacional del Cáncer (INC), se diagnostican por año 22.000 casos de cáncer de mama, que representa el 32% de los tumores malignos en mujeres; y más de 11 mil casos de cáncer de próstata, registro que representa el 20% de todos los tumores malignos en varones.
“Nosotros lo que queremos es que una persona que va a su consulta clínica, a su control ginecológico o urológico anual, se le pueda indicar que se realice Oncoliq junto con la glucemia y el colesterol. Es decir, que se sume a los estudios que normalmente los médicos piden hacer a sus pacientes”, declaró la bióloga.
La investigadora contó que sólo el 30% de los tumores tiene métodos denominados de screening, como ser la mamografía o las radiografías de tórax en el caso del cáncer de pulmón. Dependiendo de las características del equipamiento, la precisión del diagnóstico va del 75% al 80%.
En cambio, la principal ventaja de Oncoliq es que puede detectar la presencia de un tumor cuando es imperceptible en el diagnóstico por imágenes. A la fecha, se comprobó que el método de Oncoliq tiene una sensibilidad del 90% para la detección del cáncer; además de ser menos invasivo que la biopsia, el método de extraer una muestra de tejido o de células del cuerpo para su análisis.
“Creemos que el test de mama va a estar disponible a partir del mes de noviembre de este año, a un costo similar a los test de Covid. Estamos haciendo ensayos clínicos, testeando en varios hospitales y clínicas de AMBA: en el hospital Posadas, en el Instituto Alexander Fleming y en el Hospital Militar. Ahora se están por incorporar la clínica Santa Isabel, el sanatorio Otamendi y la clínica Zubizarreta”, detalló De Siervi.
Desde el inicio del proyecto, el grupo contó con el aporte de la Fundación Williams y actualmente obtuvieron un subsidio PICT Start Up, otorgado por la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i), para realizar la etapa de validación y el desarrollo del prototipo.
Fuente: Medios UNNE