El dulce de leche fue declarado Patrimonio Cultural Alimentario y Gastronómico de la Argentina y es sinónimo de argentinidad en todo el mundo. Esta fecha fue establecida en 1998 por el Centro Argentino de Promoción del Dulce de Leche y Afines para promocionar su consumo y producción. Según las últimas estadísticas, en nuestro país se producen 128.000 toneladas al año del manjar lácteo y los argentinos consumen un promedio de 3,2 kilos.
Chile es el país que más demanda dulce de leche argentino, seguido de Canadá, Brasil, Estados Unidos y Canadá; en la Unión Europea, el principal mercado es España. Sólo en 2021, se exportaron 4.079 toneladas y en lo que va de este año, ya se exportó un 4% más de dulce de leche.
En cuanto a las formas de consumo en el hogar, los argentinos prefieren dulce de leche untado, ya sea en tostadas o pan, que representan el desayuno o merienda tradicional; y hay quienes lo comen de a cucharadas, directo del pote. En segundo orden, se usa el dulce de leche en preparaciones como postres.Si hablamos de helado, los argentinos preferimos el de sabor a dulce de leche por encima de los otros, ya sea granizado o solo.
Fuente: Agencia Télam