La Cámara de Diputados votó en contra del veto presidencial a la Ley de Emergencia del Hospital Garrahan, ratificando así la vigencia de la norma que declara en situación crítica al principal centro pediátrico del país.
Los legisladores rechazaron la medida del Ejecutivo y defendieron la necesidad de garantizar recursos extraordinarios para sostener el funcionamiento del hospital, que atiende a miles de niños y niñas de toda la Argentina.
La ley establece un refuerzo presupuestario especial, contempla la incorporación de insumos médicos de alta complejidad y habilita mecanismos ágiles de contratación de personal de la salud, con el objetivo de paliar la crisis que atraviesa la institución.
Durante el debate en el recinto, distintos bloques de la oposición remarcaron que “la salud pública no puede ser objeto de ajustes” y que el Garrahan “es un emblema nacional que merece atención prioritaria”. En tanto, desde el oficialismo advirtieron sobre las implicancias fiscales de la norma, pero no lograron revertir el resultado.
De esta manera, el Congreso mantuvo en pie la Emergencia del Garrahan, lo que obligará al Gobierno a instrumentar las medidas dispuestas por la ley para atender la situación del hospital pediátrico de referencia en Latinoamérica.