Como efecto de la apreciación cambiaria se duplicaron los tours de compras a Chile. Por el paso Cristo Redentor cruzan unos 55 micros diarios, según confirmó personal aduanero a Ámbito. La diferencia en los precios va del 30% al 70%, pero la demora para atravesar la frontera puede superar las diez horas.
Ya llegan micros de Córdoba, San Juan y Buenos Aires. El fenómeno comienza a generar complicaciones en los comercios mendocinos, que pidieron redoblar los controles de la Aduana. Preocupa además por el rol de los “bagayeros”, los mercados “persa” y un festival de mercadería falsificada.
Como efecto de la apreciación cambiaria se duplicaron los tours de compras a Chile. Por el paso Cristo Redentor cruzan unos 55 micros diarios, según confirmó personal aduanero a Ámbito. La diferencia en los precios va del 30% al 70%, pero la demora para atravesar la frontera puede superar las diez horas. Ya llegan micros de Córdoba, San Juan y Buenos Aires. El fenómeno comienza a generar complicaciones en los comercios mendocinos, que pidieron redoblar los controles de la Aduana. Preocupa además por el rol de los “bagayeros”, los mercados “persa” y un festival de mercadería falsificada.
Este fenómeno encuentra su reacción más inmediata en los servicios. Para el Banco Central, esa cuenta pasó de exhibir un superávit de u$s84 millones en enero a tener un rojo de u$s650 millones en septiembre, a pesar de que el dólar tarjeta está $500 por encima de los dólares financieros.
Las largas filas en el paso Cristo Redentor para cruzar de Mendoza hacia Chile se transformaron este año en moneda corriente. “Los tours de compras más que se duplicaron con respecto al año pasado, tenemos unos 55 micros por día cruzando la frontera para comprar de todo”, detalló personal aduanero a Ámbito.
A los micros que partían habitualmente de Mendoza, se sumaron otros de San Juan, Córdoba y hasta Buenos Aires. En muchos casos los ómnibus van repletos de “bagayeros”, personas que son contratadas para traer la mercadería que luego se revende.
Ingresa al país de todo, pequeños electrodomésticos, celulares, pero centralmente indumentaria con marcas falsificadas. Mayormente los artículos traídos desde Chile van a parar a los “persas”, mercados mendocinos similares a los que se pueden encontrar en el predio de “La Salada”.
La apreciación del peso argentino multiplica los tours de compras a Chile. Crecen los problemas para la Aduana y las quejas de los comerciantes argentinos.