«Estoy llevando otras confirmaciones como ser fotos y audios donde se va a esclarecer la participación de otras personas en la posibilidad de que el chico (por Loan) haya sido secuestrado», contó el letrado que defiende a dos de los tres detenidos.
El abogado Jorge Monti, quien defiende a la pareja detenida (Daniel Ramírez y Monica del Carmen Millepi) por la desaparición de Loan Peña, asegura que tiene las suficientes pruebas que permitirían determinar la participación de otras personas en lo que podría ser el posible secuestro del menor de cinco años, a quien lo buscan intensamente desde hace ocho días.
«Voy a llevar a la Fiscalía pruebas contundentes. Les presenté cinco puntos de pruebas y ahora estoy llevando otras confirmaciones como ser fotos y audios donde se va a esclarecer la participación de otras personas en la posibilidad de que el chico (por Loan) haya sido secuestrado», explicó el letrado en diálogo con Radio Dos sobre la hipótesis de que el menor podría haber sido raptado.
A su vez, Monti sostiene que su principal hipótesis es que Loan no se perdió. Además, cuestionó que desde la Fiscalía se «encerraron en la teoría del extravío» y que para su consideración «habría que dejar abierto dos o tres líneas más de hipótesis».
Por otra parte, dijo que Millepi, en el transcurso de esta mañana, será indagada por la Fiscalía y aseguró que su defendida «está dispuesta a responder las preguntas de quién sea,» porque «está con mucha seguridad respecto a su posición y el desconocimiento absoluto del hecho».
Por último se refirió sobre su renuncia en defender a Bernardino Benítez, quien es el tío de Loan y que también se encuentra detenido e imputado. «A mí me contratan para defender a Ramírez y a Millapi, Cuando yo llego al acto de formalización de la imputación, el martes, me encuentro que había una tercera persona, por una cuestión de solidaridad, yo te voy a representar en este acto, pero decile a tu familia que me llame que hable conmigo, le dije. Pues en el fondo hay una cuestión económica, yo vivo de esto. Pasaron tres, cuatro días, nadie se comunicó conmigo», explicó el letrado.