Uno de los hijos del Loco reveló que más allá de la fractura de cadera, su padre atravesaba una época dramática desde que había fallecido su mujer.
Lucas Gatti, uno de los hijos de Hugo, habló luego de la muerte de su padre este domingo a sus 80 años y expresó que más allá de la fractura de cadera que sufrió en febrero y por la cual terminó internado, el Loco prácticamente murió el día que falleció su mujer, hace ocho meses.
En la puerta del hospital Pirovano, donde murió el exarquero de Boca, su hijo expresó en diálogo con los medios: «Él estaba en paz, ha peleado hasta el último momento. Junto a mi hermano aprovecho para agradecerle al Hospital Pirovano, han hecho todo. Era una persona fuerte y lo ha demostrado».
Además, se refirió a la decisión de la familia de quitarle el respirador mecánico que llevaba desde hace unos días tras sufrir una neumonía bilateral y una insuficiencia cardíaca y renal: «Se llega a un punto en donde alargar el sufrimiento no tiene más sentido: que (los doctores) hagan cosas para que siga y alargar algo que no tenga sentido. Es para evitar alargar el sufrimiento e inútilmente una agonía».
A su vez, sobre el episodio que llevó al Loco al hospital, Lucas tuvo una desgarradora definición: «Tuvo un accidente en la calle, se fracturó la cadera, pero la realidad es que mi padre se fue el día que murió mi madre, ocho meses antes. Hemos hecho de todo para llevárnoslo a Europa, donde vivía yo. Pero él no ha querido…».
A partir de ese día, ya no era Superman. La caída fue una anécdota, la razón por la cual entró al hospital. Todo arranca con un estado anímico, el día que murió mi madre prácticamente ese día también había muerto él», continuó Lucas su relato y agregó: «Cuesta hablar. Tuvimos la suerte de vivir con Superman. Todos conocen al personaje y nosotros conocemos el personaje, desde dentro. Solamente podemos agradecerle a la vida que nos ha dado la posibilidad de vivir al lado de un genio, eso no nos lo quita nadie».
Por otro lado, se refirió a la versión del Loco que menos se conoce: «Como padre, no lo puedo explicar. Estos tipos no se explican, salen uno cada tanto y, como era arquero, era padre; y como era padre, era marido. Un tipo diferente. Lo llamaban ‘loco’, ‘polémico’, pero era un genio. Nunca vi un tipo con tanta intuición. Así era en casa también».
«El mensaje más grande que dejó es que, sobre todo en los tiempos que corren, él nunca se preocupó por lo que hay que decir o no. Cuando hablabas con él, sabías que el tipo decía lo que pensaba; te guste o no, estés de acuerdo o no. Eso no ocurre mucho hoy… Eso es un valor que no tiene precio. Siempre fue un tipo muy legítimo, muy puro», señaló sobre la personalidad de su padre y concluyó: «Él fue el marketing puro cuando el marketing no existía. El mundo del fútbol lo va a recordar como un tipo que cambió todo».