«Un Lamborghini Diablo y un edificio para mis hijos» era lo que supuestamente iba a comprar el feliz ganador de los más de 500 millones de pesos.
Cuando se supo que el gran premio salió en Goya todas las miradas se posaron en la segunda ciudad de Corrientes en la búsqueda del nuevo millonario. Así es como terminaron adjudicando el gran premio a un muy conocido productor de apellido Fernández, que ya tuvo suerte anteriormente en otras jugadas de pozos abultados.
El imaginario popular fue tan lejos que se hablaba de que el feliz apostador tenía intenciones de adquirir un auto de alta gama y un edificio de departamentos para sus hijos. Pero en las últimas horas el interrogante de quien es el ganador volvió a tomar dimensión ante la desmentida oficial de la familia Fernández.
«Estamos asustados, tememos por nuestra seguridad» expresó la familia pidiendo que no los relacionen más con los más de 500 millones que se llevó el o la misterioso/a goyano/a.