Con la euforia aún a flor de piel, luego de vencer con su club Villa Alvear por 2 a 0 a San Fernando en la gran final del año, la campeona de la Liga Chaqueña repasó lo que dejó una nueva temporada. «Hay varios equipos fuertes, el crecimiento de la liga se está danto año a año», remarcó.
«El fútbol femenino de la Liga Chaqueña de Fútbol está en franco crecimiento y esto se nota año tras año; está claro que si las mujeres ponemos sacrificio y esfuerzo podemos llegar lejos, eso es lo que tratamos de transmitir». Con la claridad con que suele manejar la pelota por la banda izquierda del ataque de Villa Alvear, Rocío Núñez resumió lo que dejó una nueva temporada del fútbol femenino, tras la definición mano a mano con San Fernando por el título de la Liga Chaqueña de Fútbol Femenino.
La euforia le sale por los poros, tras la final de año que se jugó el martes en cancha de Estudiantes, en un intenso partido en el que las «Azules» se impusieron por 2 a 0 y se quedaron coronaron como el mejor equipo del 2022. El encuentro se encaminó desde el principio, ya que al minuto de juego, Núñez abrió la cuenta. A partir de allí, el equipo manejó la ventaja hasta que encontró el segundo, que terminó por definir la gran final.
«Hicimos un gran esfuerzos durante todo el año y logramos imponernos ante un duro rival: encontramos el gol rápido y después pudimos mantener al superioridad hasta liquidarlo», resumió la medio campista en declaraciones a Radio Provincia. Al disputarse entre semana, los festejos fueron más «medidos» de lo que se esperaba. «Salimos sí, pero un poquito porque ya teníamos que descansar», bromeó la figura del encuentro.
A pesar de que el rival fue el mismo con el que definieron mano a mano el Torneo Clausura, Núñez destacó que son «varios los equipos que hicieron un buen papel, como Vélez, Sarmiento, Policiales, Güiraldes y Defensores de Vilelas, entre otros». De cara a lo que viene, trazó como objetivo «mantener el nivel y seguir mejorando». «Alvear es un equipo que busca estar siempre en lo más alto, para poder seguir ´enterrando rivales´, cerró en clara referencia al apodo de “Funebrero» que caracteriza al club.
Amplia trayectoria
En Villa Alvear, Núñez comenzó a cosechar los frutos prolífica carrera que comenzó hace 6 años, en Estudiantes. Luego, pasó por club de Amigos hasta desembarcar en el «Funebrero». A sus 29 años, ha sabido encontrar los secretos de varias posiciones. Comenzó jugando de enganche, en la posición del 10 clasica, para luego pasar a ser mediocampista por izquierda, lo que se conoce como «interior», en la nomenclatura más reciente.
En Villa Alvear, probó en distintos puestos, fue centrodelantera pero también defensora, marcando la punta por izquierda. «Ahora volví a la mitad de la cancha y trato de aprovechar la experiencia, por suerte en todos lados me fui me recibieron de la de la mejor manera, así que estoy muy contenta y agradecida», aseguró y aportó: «Me adapto bien a lo que pide el técnico, por eso puedo lograr continuidad».
La vida más allá de la redonda
Cuando comenzó a jugar, Rocío repartía las horas en varias actividades pero, en el último tiempo el entrenamiento ocupa buena parte de su rutina diaria. «Antes trabajaba hasta las 2 de la tarde y después me iba a entrenar, pero ahora solamente el entrenamiento, no tengo familia carga, así que no tengo demandas extra; con lo que puedo obtener del club voy afrontando los gastos», describió.
En este sentido, explicó que Villa Alvear se encarga de gestionar becas, equipamientos y botines; entre otras cuestiones, para que las jugadoras puedan dedicar la mayor cantidad de tiempo posible al deporte.