El magnate tecnológico fue uno de los protagonistas en la jornada de toma del poder del republicano, aunque también generó fuertes controversias.
El empresario dueño de Tesla y X, Elon Musk, ha sido un ferviente militante de Donald Trump y flamante nuevo funcionario, por lo que participó activamente de la asunción del presidente de Estados Unidos, aunque no pudo evitar las polémicas debido a un muy particular gesto durante su discurso.
Poco después de la investidura de Trump, Musk estuvo en el estadio Capital One para dirigirse a los seguidores del republicano. Durante su discurso, realizó ciertos gestos que no tardaron en generar repercusiones en las redes sociales, donde los emparejaron al típico saludo nazi.
Musk no fue el único magnate que estuvo este lunes presente en la asunción de Trump. Entre los invitados a la segunda toma de posesión en Washington, D.C. se encontraban otros dos directores ejecutivos de tecnología multimillonarios: Jeff Bezos de Amazon y Mark Zuckerberg de Meta.
A ellos también se unieron el director ejecutivo de Google, Sundar Pichai, y el director ejecutivo de Apple, Tim Cook. Millonarios tecnológicos que muchos se preguntan si todos tendrán un rol clave en el gobierno de Trump.