Claudio Poggi culpó al gobierno saliente de Alberto Rodríguez Saá; afirmó que recibió un déficit de 125.000 millones de pesos; convocará a sesiones extraordinarias para pedir tomar deuda
El gobernador de San Luis, Claudio Poggi, afirmó en la noche de este jueves que pagará los sueldos estatales de diciembre y enero en dos cuotas en el marco de la presentación del estado financiero de la provincia puntana. Poggi, quien ya fue gobernador entre 2011 y 2015, en ese momento aliado a los Rodríguez Saá, anunció un fuerte ajuste debido al déficit de “más de 125.000 millones de pesos” (equivalentes a unos 119 millones de dólares al dólar MEP) que dejó la gestión saliente de Alberto Rodríguez Saá, según afirmó.
Poggi, elegido por Juntos por el Cambio (JxC), subrayó que debe eliminar el déficit. Para ello convocó a la Legislatura puntana a sesiones extraordinarias para que lo habilite a tomar deuda por un monto superior, incluso, al que afirmó que el gobierno saliente le deja de deuda: 150.000 millones de pesos (casi 143 millones de dólares al MEP). Equivale a seis meses de coparticipación, según sostuvo.
El gobernador, además, decretó el estado de emergencia pública en materia económica, financiera, administrativa, social, sanitaria, alimentaria, educativa y de seguridad por el término de un año en la provincia.
Poggi, por otra parte, explicó que durante la última semana del mes se hará un censo presencial a los empleados de la administración pública y a los beneficiarios de planes sociales, ya que, según afirmó, hubo un aumento del 66% del plantel de recursos humanos en ocho años de gestión de Rodríguez Saá. También anunció que revisará contratos realizados el último año, sobre todo de los contratados entre la elección provincial de junio y las posteriores.
En línea con el gobierno nacional, Poggi, quien se desempeñaba como diputado nacional antes de asumir como gobernador, remarcó que suspenderá la pauta oficial por cuatro meses. Luego, hará un registro distributivo pero con una reducción a “valores razonables”. El dirigente político dijo que “durante este año cuatro mil millones de pesos fueron destinados en concepto de pauta publicitaria”.
“Las obras públicas millonarias que recibieron anticipos financieros en los últimos meses de la anterior gestión se suspenderán y solo continuarán las que están en ejecución con su correspondiente auditoria”, expresó y lamentó que una de las fortalezas que tenía San Luis era la de tener “las cuentas en orden, mientras hoy es una de las debilidades”.
En su mensaje, que fue trasmitido por los medios oficiales de la provincia, el mandatario puntano aprovechó para reivindicar su administración entre 2011 y 2015. “En 2015 cuando finalizamos nuestro gobierno se entregó dinero, que llamábamos fondo anticrisis, por el equivalente a 100 millones de dólares. Durante ese período, el gobierno saliente cobró un juicio a la Nación, que se ganó durante nuestra administración, por 191 millones de dólares. Es decir que se dispuso de 291 millones de dólares además de los ingresos diarios, la coparticipación, los impuestos provinciales”, aseveró.
Además, resaltó que “de esos recursos quedaron 16 millones de dólares, que a día de hoy equivalen al 60% de una nómina salarial”. “En ocho años se gastaron 275 millones de dólares y sólo quedó un remanente de 16 millones, que no alcanzan ni para pagar sueldos de un mes”, lamentó.
“Este el primer informe del estado de la administración recibida. Estoy confirmando con datos que anticipé el domingo, que la solvencia fiscal de San Luis pasó a ser una de nuestra principales fortalezas a una de nuestras debilidades”, insistió. “Vamos a salir de esta crisis, pero no tenga duda que la pésima administración y corrupción fueron la causales, todos serán llevados a la justicia”, anticipó el gobernador y concluyó con una ironía: “¡Gracias, Alberto! Nos dejaste la provincia fundida”.
Agencia Télam