Los campeones del mundo se medirán ante el único invicto de las Eliminatorias en medio de un clima hostil.
La Selección Argentina afrontará hoy un duelo muy complicado por las Elimiminatorias rumbo al Mundial de México, Estados Unidos y Canadá de 2026. Se medirá contra Colombia, último rival en la consagración de la Copa América, en Barranquilla, un ciudad marcada por sus elevadas temperaturas y altísima humedad.
A la hora del partido, 15.30 local y 17.30 de nuestro país, se espera que el térmómetro marque por encima de 32 grados y que la humedad alcance el 100 por ciento, un escenario que podría hacer mella en los dirigidos por Lionel Scaloni.
El DT de la Selección Argentina hizo público su malestar por el horario, poco habitual, en que fue programado el partido. «Iremos a un lugar donde hace muchísimo calor y jugaremos en un horario que no debería ser, que no ayuda al espectáculo, pero dicidieron eso. No digo que tenga ventaja uno u el otro», manifestó antes del viajar.
Por su parte, su compatriota Néstor Lorenzo, entrenador de Colombia, le restó importancia a las condiciones climatológicas: “Sabemos que Barranquilla tiene un clima especial y, de pronto, nos podemos adaptar un poquito mejor por la memoria que tiene el jugador. Más allá de eso, nuestros jugadores están jugando en Europa al igual que los argentinos. Pero sí, no es una novedad que se siente el calor. Es un partido, disfrútenlo y no fomenten el morbo este que se está generando por la temperatura».
Luego, fue un poco más allá y agregó: «Como nunca dije en ninguna conferencia de prensa y nos pasó en Estados Unidos a nosotros, nosotros entrenamos para dos partidos de la Copa América en Phoenix, con 45 grados. Teníamos que entrenar con 45 grados por seis días, porque te obligaban a estar tres días antes en la sede y con muchos menos días de recuperación por haber empezado tarde porque fuimos el último grupo, cuatro días después de Argentina. Todo eso también influyó pero jamás me escucharon a mi en una conferencia de prensa diciendo todo eso. Sin dudas que el físico de nuestro muchachos lo sintieron».