El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, acusó hoy al presidente de Rusia, Vladimir Putin, de haber «destrozado» la paz en Europa con el ataque «inaceptable» perpetrado con Ucrania, y descartó la posibilidad de que la Alianza Atlántica envíe cazas de combate a la zona de conflicto.
«El presidente Putin destrozó la paz en Europa y los aliados condenan la brutal e injustificada invasión contra Ucrania», afirmó Stoltenberg en declaraciones desde Polonia donde se reunió con el presidente, Andrzej Duda.
«El ataque ruso es por completo inaceptable, y fue facilitado por Bielorrusia», añadió Stoltenberg durante una visita a la base aérea polaca de Lask.
El economista y político noruego defendió las duras sanciones aprobadas contra Rusia por los aliados y el apoyo militar y humanitario a Kiev, pero enfrió la posibilidad de ir más allá: «La OTAN no va a ser parte del conflicto», subrayó.
«Nuestro compromiso con el Artículo 5, nuestra cláusula de defensa recíproca (según el cual un ataque a un país miembro es considerado contra todos los miembros de la OTAN) es férreo. Protegeremos cada palmo de territorio de la OTAN», prosiguió.
Sin embargo, destacó que la alanza militar «no busca entrar en conflicto con Rusia» e instó a Moscú a «retirarse inmediatamente» de Ucrania.
En la misma rueda de prensa, el presidente polaco se sumó a esta postura, apuntando que se busca evitar una «injerencia militar» y centrando por ahora los esfuerzos en «mandar más ayuda humanitaria a los ucranianos».
La idea de reforzar al Ejército ucraniano poniendo a disposición cazas de combate de países europeos había sido recogida el pasado domingo por el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, tras la reunión de cancilleres de los Veintisiete, pero no fue confirmada por los países interesados y existen dudas sobre si el paso podría escalar la guerra con Rusia.