El ministro de Economía Luis Caputo negó una situación de atraso cambiario por el ritmo de la inflación acumulada desde la devaluación del 13 de diciembre, y planteó que la suba de los precios mensuales en los próximos meses será más baja de lo que se anticipa.
Distintos consultores vienen alertando sobre un efecto de atraso cambiario tras el salto devaluatorio del inicio de mandato de Javier Milei, que llevó el tipo de cambio oficial a los $800, un valor que estaba por encima de las proyecciones privadas en ese momento. Desde ese puntapié, el dólar administrado por el Banco Central actuó como «ancla» nominal con reajustes de solo 2% mensual ante un panorama inflacionario que avanza mucho más rápido.El jefe de la cartera de economía salió al cruce de un posteó en que se realizó en la red social X (ex Twitter) con su propia opinión sobre cómo serán los próximos meses para el país. El posteo se refería a un informe de SBS concluía que para abril la Argentina perdería toda la ganancia de competitividad que había conseguido con el movimiento inicial cambiario, lo que implicaría que a la altura del año en que comienza la liquidación de la cosecha gruesa de la soja, debería tener lugar una nueva devaluación previa. «Los niveles de inflación que suponen ese análisis están bastante alejados de la realidad, empezando por enero que ya es casi dato va a estar en el entorno al 20 por ciento. También son muy superiores al REM, que espera 21,9 / 18 / 15,3 y 13 (de enero a abril). Por lo tanto, la conclusión está sesgada por un supuesto que hoy por hoy no comparte nadie«, mencionó Caputo.
Por su parte, la consultora LCG en un informe resumió la actividad cambiaria de enero. «Después del sinceramiento cambiario y el esquema 80% / 20% aplicable a la liquidación de exportaciones, el BCRA logró consolidar su posición compradora en el MULC. Pero con un crawling del dólar oficial al 2% mensual que eleva la expectativa de devaluación en el corto plazo, el promedio diario de compras se redujo sensiblemente de USD 207 millones en diciembre a USD 149 millones en enero«, dijo dicha consultora.» «No creemos que en este contexto el BCRA tenga margen para sostener el atraso del tipo de cambio por un período prolongado. Vemos como probable que el dólar oficial vuelva a corregirse más temprano que tarde y que el BCRA se vea obligado a sostener los controles sobre el mercado de cambios por lo menos durante todo el primer semestre, hasta tanto pueda consolidar el proceso de acumulación de reservas», planteó.»Después de la devaluación de diciembre, el tipo de cambio debería estar de 35% a 40% por encima de ese nivel. Esto, en base a nuestras proyecciones de inflación arroja un dólar entre $1.740 y $1.850 para fin de 2024. Esto es imprescindible para que la cosecha gruesa se liquide con rapidez y se libere el acceso al MLC lo más rápido posible», mencionó Walter Morales, presidente de Wise Capital. «Tengamos en cuenta que en los últimos dos meses se perdió la mitad de la ganancia de competitividad de la devaluación. A favor, la inflación se está desacelerando pero aún quedan por delante ajustes de tarifas y los efectos de la segunda ronda de devaluación», dijo.