El Sumo Pontífice desea asomarse este domingo 23 de marzo desde la ventana del Policlínico Gemelli poco después de las 12 para saludar e impartir la bendición.
La Oficina de Prensa de la Santa Sede anunció a los periodistas que el Papa tiene la intención de asomarse desde el Hospital Gemelli poco después de las 12:00 para saludar a los fieles e impartir la bendición el domingo 23 de marzo. El texto del Ángelus será publicado como en las semanas anteriores. Vatican Media estará presente para la filmación y distribución de las imágenes.
Aunque los médicos aún no dieron detalles sobre el alta hospitalaria del Papa, este saludo dominical marcaría su primera aparición pública desde que fue ingresado el 14 de febrero. La noticia llega después de que la última actualización de su estado de salud informara sobre las continuas mejorías tanto en sus funciones respiratorias como motoras.
A pesar de estar hospitalizado durante las últimas cinco semanas, el Papa siguió con su trabajo, enviando mensajes, concelebrando Misa e incluso grabando un audio que fue difundido el 6 de marzo durante el rosario por su salud en la Plaza de San Pedro. En él, agradecía los testimonios de amor y solidaridad que recibió.
Revelaron que el papa Francisco deberá «volver a aprender a hablar»
El cardenal Víctor Manuel «Tucho» Fernández reveló que el papa Francisco no considera «para nada» la renuncia, pero necesita «aprender a hablar de nuevo» y recuperar la fuerza de su voz antes de regresar al Vaticano.
«El Papa es un hombre de sorpresas y seguramente habrá aprendido muchas cosas en este mes y le saldrán afuera del sombrero aun sabiendo que esto significa un esfuerzo muy pesado para él, un momento difícil, sé que será fecundo para la Iglesia y el mundo», explicó Fernández hablando con los periodistas al margen de un acto.
Sobre el estado de salud de Francisco, de 88 años, internado desde el pasado 14 de febrero por problemas respiratorios, añadió que siempre confió en su recuperación «porque se encuentra verdaderamente muy bien físicamente».
“Ahora hace falta una rehabilitación porque mucho tiempo con la oxigenación de altos flujos te seca todo y casi tienes que volver a aprender a hablar”, destacó el cardenal argentino.
El prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe comentó que se refería a que el Papa Francisco “tiene poca fuerza en la voz como supimos del mensaje del otro día y ahora necesita un poco de terapia, un tiempo de recuperación de la potencia de su voz y también de sus músculos porque ha estado demasiado tiempo quieto”.
“Imaginen lo pesado que es para él, pero él es de estos jesuitas de antes como Spadaro, esos de otros tiempos, que tienen una fuerza inmensa, una capacidad de sacrificio, de encontrar un sentido a estos momentos oscuros”, agregó.
Estas cinco semanas de hospitalización del Papa Francisco, continuó el purpurado, “ciertamente ha sido un tiempo muy duro (…) para él, que ama donarse enteramente, sentirse en la cama de un hospital sin poder ayudar a los demás, dar una palabra de consuelo a otras personas”.
“Él tiene una gran capacidad para aprender de la vida, de todo lo que se le presenta, para sacar algo hermoso de los momentos más oscuros. Por eso estoy seguro que de esta experiencia del Papa saldrá mucho bien”, continuó. “No sabemos lo que será, pero serán, digamos, las sorpresas del Papa Francisco”.
Luego de resaltar que los médicos le han pedido al Papa Francisco “que busque otro sistema vida y de trabajo” para cuidar su salud, el Cardenal Fernández subrayó que ahora se viene “una nueva etapa que será ciertamente fecunda, que será parte de su pontificado”. “Eso era realmente lo que yo esperaba, que éste no sea el final, sino que sea esta nueva etapa en la que el Papa seguirá sin duda dándonos muchas cosas”, añadió.