El primer mensaje de texto de la historia fue subastado en Francia

El primer SMS de la historia, de 15 caracteres que decía «Feliz Navidad» en inglés, fue enviado por el operador Vodafone el 3 de diciembre de 1992. Este martes fue subastado en 107.000 euros en una venta en la casa francesa Aguttes.

El primer mensaje de texto o SMS de la historia, enviado por el operador Vodafone el 3 de diciembre de 1992, fue subastado este martes en 107.000 euros (más de 120.000 dólares) en una venta organizada por la casa Aguttes en Francia. El comprador, cuya identidad completa no trascendió, es un canadiense que trabaja en el sector de las nuevas tecnologías y ahora es el propietario exclusivo de una réplica digital única del protocolo de comunicación original que transmitió este SMS, informó la agencia AFP. El dinero recaudado será destinado para la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).

Tras añadir los gastos de subasta, el mensaje fue vendido por 132.680 euros (unos 149.000 dólares). Recibido en su momento por el empleado de Vodafone Richard Jarvis, el mensaje de texto tiene 15 caracteres y dice «Merry Christmas», en español, «Feliz Navidad».

¿Qué son los Non-Fungible Token?
El SMS fue subastado como objeto digital o «NFT», acrónimo de Non-Fungible Token, que en español quiere decir activo no fungible. Se trata de un nuevo tipo de activo numérico, como las criptomonedas, y utiliza la misma tecnología de las cadenas de bloques («blockchain») que consisten en una forma de identificación que involucra a una multitud de individuos, sin un núcleo aglutinador.

Un NFT u «objeto digital» es único y no puede ser intercambiado por un equivalente. La mayoría de los compradores son coleccionistas o especuladores que esperan poder venderlas más tarde y obtener una ganancia, agregó AFP. De hecho, los NFT fueron protagonistas de varias subastas con precios muy altos; el récord fue alcanzado por el artista estadounidense Beeple con una obra totalmente digital por 69,3 millones de euros (más de 78 millones de dólares) en marzo pasado, en la casa Christie’s de París.