El delantero de Brasil y del Tottenham no pudo aguantar las lágrimas cuando repasó uno de los momentos más delicados de su carrera profesional.
Richarlison recordó sus momentos más oscuros, donde reconoció que atravesó días duros luego del Mundial de Qatar e instó a los futbolistas a buscar ayuda por problemas de salud mental.
«Recién terminaba de jugar la Copa del Mundo, estaba en la cima. Estaba alcanzando mi límite. No sé, no voy a decir que quería quitarme la vida, pero estaba en una gran depresión y quería rendirme», relató y reconoció que lo más difícil fue hablar con su padre: “Ir a mi padre, que persiguió este sueño conmigo y decirle «Papá, quiero rendirme’ eso fue lo más duro de todo».
Luego, ya entre lágrimas, agregó: “Siempre fui una persona fuerte mentalmente. Pero aún así, después del Mundial con Brasil todo pareció desmoronarse. Creo que la terapia, guste o no, me salvó. Salvó mi vida. Después del Mundial sólo pensaba basura, incluso en Google, sólo buscaba basura, y sólo quería ver basura sobre muerte”.
Vale recordar que en septiembre del año pasado el delantero dejó una de las imágenes deportivas de la primera fecha de las Eliminatorias Sudamericanas después de que en medio de la goleada por 5-1 frente a Bolivia las cámaras lo enfocaron llorando en el banco de suplentes tras ser sustituido a los 70 minutos. En la reciente ventana internacional, donde Brasil venció a Inglaterra y empató con España, el punta del Tottenham estuvo en el banco de suplentes y no ingresó en ninguno de los amistosos.