Millones de italianos votan hoy y mañana a los jefes comunales de 1.162 ciudades. En la capital hay 22 candidatos a suceder a la alcaldesa Virginia Raggi, que se postula para su reelección. Las fuerzas de centroizquierda que sostienen al premier Mario Draghi aparecen divididas.
Millones de italianos comenzaron a votar nuevos alcaldes en Roma, Milán, Turín y más de 1.100 ciudades en una elección vista como una prueba de alianzas políticas antes de la votación nacional dentro de poco más de un año.
Un total de 12.015.276 italianos están llamados a votar este domingo de 7 a 23 y el lunes de 7 a 15 para elegir a los Gobiernos de 1.162 comunas, entre ellas 18 cabeceras de provincia como Roma, Turín, Milán, Nápoles y Bolonia.
Se esperan los primeros resultados posteriormente, aunque muchos votantes tendrán que aguardar dos semanas para saber quién será su alcalde.
Una segunda vuelta se llevará a cabo el 17 y 18 de octubre en los municipios con más de 15.000 personas entre los dos candidatos más votados si ninguno de ellos obtuvo más del 50% de los votos
En las ciudades más grandes, incluidas Roma, Turín, Nápoles y Bolonia, se espera una segunda vuelta.
En tanto, en Milán, el alcalde Giuseppe Sala declaró a sus seguidores que cree que podrían obtener suficientes votos para darle otro mandato de cinco años de forma directa sin tener que pasar por un balotaje.
En la capital Roma, 22 candidatos buscarán suceder a la alcaldesa Virginia Raggi, del Movimiento Cinco Estrellas, que se postula para la reelección en el cargo que asumió en junio de 2016.
Las fuerzas de centroizquierda que sostienen al premier Mario Draghi aparecen divididas.
En la «ciudad eterna», las fuerzas de centroizquierda que a nivel nacional forman parte del Ejecutivo que sostiene a Mario Draghi como premier aparecen divididas en tres listas con posibilidades de llegar al Gobierno.
Una de las listas está liderada por Raggi y las otras por el exministro de Economía Roberto Gualtieri, del Partido Democrático, y el exministro de Desarrollo Económico Carlo Calenda, de la fuerza Acción.
Desde la centroderecha y la derecha, las fuerzas que forman parte del Gobierno de Draghi, la Liga de Matteo Salvini y Fuerza Italia de Silvio Berlusconi, llegaron a un acuerdo con los opositores a nivel nacional de Hermanos de Italia, de Giorgia Meloni, para presentar como candidato de unidad del sector al abogado Enrico Michetti.
Las encuestas de opinión indicaron que los dos que probablemente obtengan más votos en el campo de los 22 candidatos serán un demócrata de centroizquierda y un candidato de derecha respaldado por la Liga y Meloni, cuyo partido tiene raíces neofascistas.
Cuando Raggi tomó el timón de la ciudad en 2016, heredó un desastre y muchos de los problemas de la capital italiana persisten.
Montones de basura no recolectada seguían arruinando la ciudad, varias estaciones de subte fueron cerradas durante meses por mantenimiento y los colectivos viejos a menudo se averiaban en sus rutas durante su mandato.
Además de emitir su voto, Raggi inspeccionó el lugar de un incendio que dañó un puente sobre el Tíber y un asentamiento de viviendas precarias a orillas del río ocupadas por personas sin hogar, otra imagen de los problemas crónicos de Roma, informó la agencia de noticias italiana Ansa.
Salvini y Meloni, aunque oficialmente aliados de la derecha, tienen la ambición de ser primer ministro italiano.
Las elecciones parlamentarias se celebrarán a principios de 2023, pero ambos líderes presionan para votar antes.
El Movimiento Cinco Estrellas, actualmente el partido más grande del Parlamento, sufrió disputas internas. Su líder recién electo, el ex primer ministro Giuseppe Conte, intentó curar las divisiones al respaldar fuertemente a Raggi.
Desde el triunfo del Cinco Estrellas en las últimas elecciones al Parlamento, en 2018, la popularidad del partido se desplomó en las votaciones para gobernador y en las encuestas de opinión pública.
Las alianzas serán cruciales para formar un gobierno tras las elecciones nacionales, ya que en el espectro político fracturado de Italia, ningún partido puede contar con una probabilidad significativa de gobernar solo.
Las alianzas serán cruciales para formar un gobierno tras las elecciones nacionales, ya que en el espectro político fracturado de Italia, ningún partido puede contar con una probabilidad significativa de gobernar solo..Los demócratas probablemente necesitarán una alianza con el Movimiento para contrarrestar la creciente popularidad de las fuerzas de derecha.
Por lo tanto, se analizará cómo les irá a las alianzas de campaña para la alcaldía en las contiendas municipales de este mes como una posible indicación del sentimiento de los italianos la próxima vez que voten por el liderazgo nacional.