Eliminación Impuesto País: ¿cómo aprovechar este nuevo escenario?

La eliminación del Impuesto País para importar en Argentina implica varios cambios importantes. A partir de ahora, las importaciones de mercaderías comprendidas en la Nomenclatura Común del Mercosur (N.C.M.) no estarán gravadas con el Impuesto PAÍS; aunque es importante tener en cuenta que este impuesto sigue aplicándose a otras operaciones, como la adquisición en el exterior de servicios personales, culturales y recreativos, así como a la importación de servicios de fletes y otros servicios de transporte por operaciones de importación o exportación de bienes.

“Con la eliminación del Impuesto PAÍS para las importaciones de mercaderías en Argentina se obtienen varios beneficios para las empresas importadoras, como ser principalmente la reducción del costo de importación, lo que permite aumentar la competitividad de las empresas importadoras; pero a su vez mejora la rentabilidad y la posición en el mercado; mejora la liquidez y con esta tener más recursos para seguir invirtiendo; aumenta la generación de empleo, ya que con el aumento de la inversión y del comercio internacional, las empresas pueden crear más empleos”, comenta Gabriel Salomón, director general de Jidoka, empresa de logística y comercio exterior.

Desde la compañía destacan también que esta resolución tiene un impacto directo sobre lo que es la zona franca, ya que siendo el espacio donde la mercadería importada “espera” para su nacionalización, desde ahora esta mercadería no sufrirá de impuestos.

Pero este escenario también plantea nuevas reglas del juego, que las empresas deberían tener en cuenta y saber cómo aprovecharlas. Desde Jidoka se recomiendan algunos pasos a seguir para potenciar estos beneficios:

1.    Revisar los costos de importación y ajustar los precios de venta que refleje la reducción del Impuesto PAÍS.

2.    Analizar los costos de producción y distribución para identificar oportunidades de reducción de costos.

3.    Revisar los contratos con proveedores y ajustar los precios y condiciones de pago

4.    Analizar la cadena de suministro para identificar oportunidades de reducción de costos y mejora de la eficiencia.

5.    Invertir en tecnología y procesos para mejorar la eficiencia y reducir costos en la importación y distribución de mercaderías.

6.    Implementar sistemas de gestión de la cadena de suministro para mejorar la visibilidad y el control de los procesos.

7.    Revisar la gestión de inventarios para asegurarse de que se ajuste a las nuevas condiciones de importación.

“Por supuesto cada empresa debe analizar su situación, pero es importante que no dejen de implementar cambios en su análisis de costos y precios, como así también analizar riesgos y oportunidades para ajustar la estrategia de negocio”, agrega Salomón.