El presidente de Secheep, José Bistoletti, sobre la situación energética de la provincia expresó: “En primer lugar, el exgobernador puede tener su propia perspectiva sobre este asunto, pero arrogarse la verdad como irrefutable y agredir a otros, acusándolos de mentirosos y extorsionadores, es, por decirlo suavemente, poco ético. Esta actitud no sorprende, dado que el exgobernador ha hecho de estas prácticas una constante en su discurso.
Respecto a la situación energética de Secheep, es fundamental destacar que el préstamo en cuestión es esencial para contratar 45 MW adicionales, necesarios para satisfacer la demanda de energía en el interior de la provincia, especialmente durante las altas temperaturas que superan los 30 grados. La actual falta de generación eléctrica se debe al retiro de los generadores de Agrekko, que operaron durante 16 años sin que se llevaran a cabo las obras necesarias para garantizar un suministro energético sostenible en momentos críticos.
Durante los 16 años de gobiernos anteriores, NO se realizaron las obras de infraestructura requeridas, disimulando la necesidad de las mismas gracias a la generación local. Cabe recordar que, desde que se decide un proyecto hasta su concreción, suelen pasar varios años. No es razonable exigir a la actual administración que resuelva en 9 meses problemas que no se abordaron en 16 años.
Los generadores de Agrekko llegaron al país en la época de Julio De Vido, cuando el costo del MW era de 40 mil dólares; hoy, el precio ha caído a 12 mil dólares, lo que ha llevado a Agrekko a retirarse del mercado, ya que operar en esas condiciones no es rentable. Es importante señalar que estos generadores eran contratados por CAMMESA (gobierno nacional), que también suministraba el combustible necesario para su funcionamiento.
Una de las obras clave para reducir la dependencia de la generación externa es la instalación del segundo generador en la Estación Transformadora Chaco, que se encuentra en la provincia desde 2017. Resulta contradictorio que la oposición critique la gestión del actual gobierno en los últimos nueve meses, cuando ellos no lograron avanzar en este proyecto durante 7 años.
En los últimos seis meses, la ejecución de la obra ha avanzado considerablemente, lo que nos permite afirmar que para el próximo año, la ET Chaco contará con ambos generadores en funcionamiento. Este es un logro significativo en comparación con la gestión anterior, que no implementó mejoras en siete años. Además, la generación fotovoltaica en Pampa del Infierno y en localidades como Villa Ángela, Sáenz Peña y Pinedo representa una solución viable para el suministro eléctrico en horarios de 8 a 17 horas.
Es importante recordar que, como ha mencionado el exgobernador, la potencia de los parques solares fotovoltaicos (PSFV) solo estará disponible durante el día. Durante la noche, el Chaco enfrenta picos de demanda que requieren soluciones como los generadores, de lo contrario, se verá obligada a restringir la demanda.
Es importante recordar que la generación fotovoltaica en el país comenzó gracias a los programas RENOVAR y RENDMI, que permitió la instalación de diversas fuentes de generación renovable, incluido el desarrollo en Chaco. Por lo tanto, las declaraciones del gobernador Jorge Milton Capitanich, que intentan atribuirse el mérito de estos proyectos, son incorrectas y engañosas.
Es fundamental destacar que la interconexión de la generación fotovoltaica al sistema de Secheep fue posible gracias a la gestión de Leandro Zdero. Esto asegura que la energía generada se integre adecuadamente al sistema interconectado, beneficiando así a todos los habitantes de Chaco.
Sin embargo, la oposición, liderada por Capitanich, busca desviar la atención de la responsabilidad que tienen en la deuda que comenzó a gestarse en enero de 2018, durante su primer gobierno. Antes de esto, Secheep cancelaba sus deudas en tiempo y forma, abastecía sus almacenes y realizaba las obras de infraestructura necesarias para satisfacer la demanda.
Además, en noviembre se presentó un convenio firmado por 24.000 millones de pesos, que implicaba un capital financiado de 117.000 millones de pesos a tasa variable. Debido a la inflación, esta financiación se ha elevado a 300.000 millones de pesos, lo que demuestra que no solo no se pagó la deuda, sino que también se dejó una carga significativa a la actual administración.
Es evidente que la estrategia de la oposición es confundir a la población, provocar descontento generalizado y perjudicar la imagen y gestión del gobierno de Leandro Zdero. Es crucial que la ciudadanía esté bien informada para poder discernir entre la realidad y la manipulación política.