Especialista explica por qué el dengue podría ser endémico en el norte argentino

Marina Stein -del Instituto de Medicina Regional de la UNNE e investigadora independiente del Conicet- señaló que urge profundizar las medidas preventivas todo el año. Destacó que hubo circulación viral durante todo el 2023. En la actual temporada se evidencia un avance en la circulación del serotipo DENV-2, en co-circulación con el serotipo DENV-1, y una muy baja incidencia de la variante DENV-3.

El año 2023 registró récord de casos de dengue en América y en Argentina, destacándose que en el NEA no hubo interrupción de la trasmisión en invierno. La jefa del Área de Entomología del Instituto de Medicina Regional de la UNNE e investigadora independiente del Conicet,  Marina Stein, señaló que urge profundizar las medidas preventivas todo el año y advirtió que se corre el riesgo de que el dengue “se transforme en endémico en las provincias del norte de Argentina”.

Según la Organización Panamericana de la Salud, en el 2023 el mundo se ha enfrentado a un repunte de la transmisión del dengue caracterizado por el número, el tamaño y la concurrencia de múltiples brotes, así como la propagación a zonas previamente libres de dengue.

En América, 2023 es el año con el mayor reporte histórico de casos de dengue, registrando más de 4,1 millones de nuevos contagios.

En la misma línea, el Boletín Epidemiológico Nacional del Ministerio de Salud de Argentina, remarcó que el año 2023 registra el mayor número de casos y de fallecidos desde la reemergencia del dengue.

En comparación con la forma en que el dengue se ha presentado desde su reemergencia en Argentina con epidemias en la época estival, se destaca la persistencia de casos durante la temporada invernal y aumentos de casos ya desde la semana epidemiológica 40, a finales de la primavera.

Según los registros del Boletín Epidemiológico, del Ministerio de Salud de la Nación, en la actual temporada se evidencia un avance en la circulación del serotipo DENV-2, en co-circulación con el serotipo DENV-1, y una muy baja incidencia de la variante DENV-3.

“Esta temporada expone claramente cómo va avanzando la enfermedad y la dinámica del mosquito vector que transmite el virus dengue”, opinó Stein.

Circulación viral

La especialista de la UNNE consideró que uno de los aspectos más relevantes de la actual temporada epidemiológica es que en provincias del NEA no hubo interrupción de la transmisión vectorial en el invierno, es decir hubo contagios todo el año, asociado a la presencia del mosquito vector que no encontró temperaturas que afectaran la sobrevida de los ejemplares adultos, en particular de la hembra que es la que transmite el virus.

Al respecto, sostuvo que, al no registrarse un invierno crudo, (donde la temperatura permanezca muchos días por debajo de los 10 ºC), los mosquitos adultos, no mueren, y las hembras pueden continuar picando y depositando huevos. Asimismo, se refugian en el interior de las casas, por lo que continúan alimentándose.

En tanto, las etapas inmaduras (larvas y pupas) presentes en los criaderos tampoco se ven afectadas y pueden continuar criándose hasta alcanzar la etapa adulta.

¿Hacia un dengue endémico?

“El hecho de que exista persistencia de casos todo el año puede marcar la posibilidad de que el dengue en provincias argentinas de clima subtropical deje de ser epidémico, es decir con interrupción del virus en época invernal, y pase a ser endémico, con presencia de casos todo el año”, manifestó Stein.

La circulación de personas desde Argentina hacia países con circulación de dengue todo el año, como Paraguay y Brasil, o viceversa, es difícil de controlar por lo que el virus está ingresando en diferentes momentos del año, explicó al respecto.

En inviernos con temperaturas bajas el virus no encuentra al vector en su fase adulta para que lo transmita, pero si las condiciones climáticas cambian la circulación puede persistir.

Por otra parte, Stein explicó que, al no registrarse un invierno con temperaturas muy bajas, la curva de casos tras el mismo empieza a aumentar cada vez de manera más temprana, mediados o finales de la primavera.

Serotipos y gravedad de casos

En relación a la mayor la circulación del serotipo DENV-2, en co-circulación con el serotipo DENV-1, Stein indicó que el avance del serotipo DENV-2 en el país en los últimos años, es “una posible explicación de la aparición de pacientes con sintomatologías más severas”.

Es que gran cantidad de personas ya contrajeron alguna vez dengue tipo 1, por lo que, al infectarse nuevamente, pero con la variante DENV-2, se exponen a una “mayor probabilidad de síntomas de mayor gravedad, incluso mayor riesgo de muerte”.

Vacunas y medidas preventivas

“El escenario del dengue durante 2023, con récord de casos, récord de muertes, ampliación territorial, persistencia en invierno y avance de otros serotipos lo que nos muestra es la importancia de sostener las medidas preventivas que apunten a la eliminación de criaderos”, señaló la especialista del IMR-UNNE.

En relación a la disponibilidad de la vacuna contra el dengue, señaló que es una herramienta novedosa pero no se utiliza para controlar la epidemia.

Indicó que, si bien la vacuna se está aplicando, no está en el calendario de vacunación obligatorio. Se la consigue en farmacias, requiere prescripción médica y tiene un valor actual elevado para muchas personas.

Pero aún si se lograra una elevada proporción de vacunados, debe tenerse en cuenta que Aedes aegypti, no solo transmite dengue sino también los virus Zika y Chikungunya para los que no tenemos vacuna.

“Intensificar las medidas para controlar al mosquito, principalmente realizando diferentes tipos de acciones que lleven a controlar la existencia de criaderos, con acciones todo el año, sigue siendo la mejor vía para controlar las diferentes arbovirosis que transmite este mosquito”, sostuvo Stein.