El hombre, imputado de matar y descuartizar a Johana González, está a días de ser notificado de la prisión preventiva, según lo que resuelva la fiscal la próxima semana.
Mario Barrientos, de 42 años, está en la recta final de una causa que va muy rápido. Y, de no surgir imponderables, la fiscal en Temática de Género, Nelia Velázquez, podría cerrar la investigación muy pronto.
Barrientos está acusado de homicidio agravado por el vínculo y en contexto de violencia de género (femicidio) y se abstuvo de prestar declaración de imputado, por lo que la semana próxima la fiscal resolverá si le dicta prisión preventiva. Pablo Vianello, el abogado de Delia Segovia, mamá de la víctima, destacó el trabajo de los integrantes de la junta interdisciplinaria a cargo de evaluar al acusado.
La prueba pericial fue solicitada por el defensor Juan Ignacio Moreno, quien dijo a que es un procedimiento de rutina para determinar la capacidad de comprensión de su defendido.
El letrado se había expresado optimista tras conocerse días atrás que no se detectaron rastros fisiológicos en tres muestras que se secuestraron del domicilio de Barrientos, en la casa que alquilaba en calle Brignoli al 235. Ni sangre ni semen se detectaron en retazos de camisa, una funda de almohada y un cubrecolchón.
En ese sentido, el querellante Vianello minimizó los resultados al considerar que hay muchas pruebas abrumadoras y que, además, testigos declararon que el 21 de mayo, mismo día que desapareció Johana, el imputado salió a buscar madera en los domicilios de los vecinos para hacer una fogata.
La Junta Interdisciplinaria estuvo compuesta por Juan José Agüero y María Ganz del Instituto Médico Forense, María Ximena Lataza Gandini, Roxana Pérez Blanco, Eufronio Spencer Álvarez, y los peritos de parte, David Martínez y Hugo Vidarte.
Los especialistas determinaron: «El estado de salud mental al momento del estudio pericial se encuentra conservado», y «sus facultades mentales al momento del hecho atribuido en fecha 21 de mayo, según la evaluación de las funciones psíquicas, se encuentra conservado».
La junta advierte que Barrientos «presenta características psicopáticas de personalidad, lo que denota un diagnóstico presuntivo compatible con un trastorno de personalidad». El imputado está en condiciones de «comprender y dirigir su conducta» y posee «capacidad para ser sometido al proceso».
Fuente: Diario Norte