Luego de consumar la negociación con Libertad de Sunchales, el equipo riojano de Riachuelo comenzó a delinear su plantilla para afrontar la próxima Liga Nacional de Básquet, metiéndose en un movido mercado de pases en el cual se alzó con la contratación de los chaqueños Pablo Espinoza y Juan Pablo Corbalán.
Corbalán llegará a La Rioja para ocupar la ficha de U23 en el nuevo plantel, luego de un prolongado tiempo en Regatas de Corrientes a donde desembarcó en 2016 desde Villa San Martín, forjando sus primeros pasos en el profesionalismo. El joven oriundo de Resistencia llegaría a reforzar la base que en principio estaría cubierta por Nicolás Paletta (ex Hindú), y cuenta en su haber con un gran caudal de minutos en las últimas temporadas del Fantasma correntino que le permitieron el rodaje necesario para ir protagonizando en la máxima categoría.
Por su parte, nacido también en Resistencia, Pablo Espinoza es ya un jugador consolidado en la Liga Nacional de Básquet y el recordado TNA. El alero polifuncional llega a la institución tras su paso por Instituto de Córdoba, aunque su trayectoria también se imprime en clubes como Argentino de Junín, Quilmes de Mar del Plata, Obras Sanitarias, Regatas de Corrientes, Salta Basket, Macaé (Brasil), y algunas participaciones con la selección argentina.
Con esta identidad chaqueña, Riachuelo comenzó su pretemporada hace solo unos días con el ojo puesto en su primera participación en la máxima categoría del básquet argentino, siendo el segundo representante provincial en alcanzar esta posibilidad, detrás del histórico equipo de Andino, donde Emanuel Ginóbili dio sus primeras apariciones.