La víctima de violencia de género estaba amenazada de muerte por su ex pareja, que hasta le había sacado el teléfono para que no pudiera denunciarlo.
Una mujer que sufría violencia de género de parte de su ex pareja, quien no sólo la golpeó y amenazó de muerte, sino que además le sacó el celular para incomunicarla, se vio obligada a recurrir al cuaderno escolar de su hijo para pedir ayuda, a través de una nota que le escribió a la maestra.
Esta se convirtió en un eslabón fundamental para que el presunto atacante sea detenido. El miércoles la Justicia de Santiago del Estero, donde ocurrió el caso, resolvió dictarle prisión preventiva.
¿Cómo ocurrió el hecho de violencia de género?
El hecho denunciado ocurrió el 20 de octubre en el barrio General Paz, cuando la mujer regresó a su domicilio cerca del mediodía y se encontró con el padre de sus tres hijos, de quien estaba separada hacía más de un año, según consignó El Liberal. El acusado se retiró pero luego regresó a la vivienda en estado de ebriedad y comenzó a recriminarle a la mujer que había cambiado los muebles de lugar.
Según consta en la denuncia, alrededor de las 19, el hombre comenzó a insultar a la mujer y en un momento la tomó del cuello y del pelo. Al ver esa escena, el hijo mayor se interpuso para defender a su mamá, por lo que el hombre agarró al nene del pelo y le dio una cachetada, diciéndole que no se vuelva a meter.
No obstante, el acusado habría amenazado a la mujer con un cuchillo para que no hiciera nada. Además, de sacarle el celular para que no pueda pedir ayuda.
En medio de un escenario de vulnerabilidad, la mujer escribió una nota en el cuaderno escolar de comunicaciones de su hijo, en la que le pedía a la maestra que al finalizar la clase ella lo acompañara a su hijo hasta la casa con la Policía. El escrito llegó a la docente, quien sin dudarlo, cumplió el pedido. El agresor fue apresado ese mismo mediodía por orden de la Fiscalía.
¿Qué decidió la Justicia?
El miércoles, dos meses después de aquel episodio de violencia de género ocurrido el 20 de octubre, la Justicia llevó a cabo una audiencia en la que se debía resolver la situación procesal del acusado.
Durante la audiencia, la fiscal del caso, la Dra. Judith Díaz, al hombre le imputó los delitos de “Lesiones leves calificadas y amenazas calificadas” en perjuicio de su ex, y “lesiones leves calificadas” en perjuicio de su hijo. Además, solicitó la prisión preventiva en contra del acusado, entendiendo la existencia de peligros procesales, así como también de la gravedad de los hechos endilgados y la situación de vulnerabilidad de la mujer.
En ese contexto, la jueza de Género, la Dra. Norma Morán, hizo lugar al pedido de la fiscal del caso y resolvió dictar la prisión preventiva por el plazo de ley en contra del acusado.