Este lunes comenzó a implementarse en Resistencia el cambio en la tarifa de transporte público, que vuelve a costar 710 pesos por una orden judicial que exige retrotraer el precio. La medida, que responde a una cautelar presentada contra el incremento, se espera que esté completamente implementada en todas las unidades a partir de este martes o miércoles.
El subsecretario de Transporte, Rodolfo Díaz, confirmó el ajuste y aclaró que la medida es resultado de un fallo judicial que la Secretaría está apelando. «Hemos retrotraído el valor de boleto de 1.150 a 710», explicó Díaz. Sin embargo, el funcionario manifestó su confianza en que la apelación prospere, considerando que «las audiencias públicas se realizaron correctamente, como lo exige la ley». Para Díaz, las objeciones no están basadas en cuestiones técnicas, sino en un trasfondo «político y partidario».
El subsecretario también subrayó el esfuerzo financiero que implica la tarifa subsidiada: «La provincia inyecta mil millones de pesos al mes para que el sistema se mantenga en un número más o menos coherente». Sin el subsidio provincial, el boleto debería costar 1.770 pesos, afirmó Díaz.
La reducción del costo es un alivio temporal para los usuarios, muchos de los cuales dedican una gran parte de su presupuesto al transporte. Díaz afirmó que el impacto social del precio actual es algo que tienen «totalmente presente» y recordó que la provincia destina recursos no solo al subsidio, sino también a otros beneficios como el boleto docente y descuentos en la tarjeta SUBE.