Este martes, los acusados por el brutal femicidio de Leonela Ayelén Giménez, de 25 años, deberán prestar declaración ante el fiscal Gustavo Valero, en el marco de una causa que ha generado profunda conmoción en la comunidad de Sáenz Peña y en toda la provincia.
Los imputados, Emanuel Giacone (comerciante) y Cristian Almeida (vendedor de autos), enfrentarán la acusación formal por homicidio doblemente agravado, en contexto de violencia de género. A pesar de las maniobras defensivas de sus abogados, Miguel Lukach y César López, quienes sostienen que no existen pruebas directas que los vinculen con la víctima, los elementos recabados por la investigación apuntan a consolidar la imputación por femicidio.
Pruebas clave que complican a los acusados
Durante la jornada del lunes, investigadores del Departamento de Investigaciones Complejas sumaron una prueba considerada fundamental: el hallazgo del celular destruido de Leonela, que fue arrojado en un zanjón. La localización del dispositivo se logró gracias al minucioso análisis de las cámaras de seguridad, que permitieron reconstruir los movimientos de los acusados desde el lugar del hecho hasta su regreso a la ciudad de Sáenz Peña.
Además del celular, que será peritado por la División de Cibercrimen del Chaco o por el propio Poder Judicial, también fueron secuestradas zapatillas con manchas de sangre, un plato con restos de cocaína hallado en el interior del Audi en el que viajaba la víctima, y una bala calibre 3.80 —idéntica a la utilizada para asesinar a Leonela— que fue encontrada en el bolsillo de uno de los imputados.
Los registros fílmicos también confirmaron que Leonela subió al Audi, vehículo que fue incautado por la Justicia como parte de la evidencia.
El celular podría revelar información crucial
El dispositivo móvil de la joven asesinada será sometido al sistema UFED (Universal Forensic Extraction Device), una herramienta forense que permite desbloquear y extraer todo el contenido del teléfono. Una vez completado este procedimiento, los investigadores esperan obtener mensajes, llamadas, ubicaciones y archivos que podrían esclarecer el vínculo entre la víctima y los imputados, y aportar pruebas determinantes sobre lo sucedido.
Justicia por Leonela
Leonela Ayelén Giménez tenía 25 años y era madre de dos hijos. Su trágica muerte ha sacudido a la opinión pública, y diversas organizaciones sociales y feministas ya han comenzado a movilizarse exigiendo justicia y el rápido esclarecimiento del caso.
El fiscal Valero, junto al equipo de Investigaciones Complejas, continúa trabajando intensamente en la recolección y análisis de pruebas. Se espera que, con la declaración de los acusados y el peritaje del celular, el caso avance hacia una eventual elevación a juicio.