Al menos siete personas murieron, 31 fueron heridas y 48 continúan desaparecidas por un deslizamiento de tierra en Maco, localidad de Filipinas, ubicada en la provincia de Dávao de Oro.
Las autoridades de Filipinas advirtieron que de los 48 desaparecidos, al menos 20 permanecen atrapados dentro de vehículos. También detallaron que se rescató exitosamente a 31 personas.
A través de un mensaje en su cuenta de la red social Facebook, el gobierno provincial expuso que «hay 758 familias en centros de evacuación». Luego, marcó que «la operación de rescate continúa» y envió un mensaje a la población, debido a que pidió que «tenga cuidado» y «rece por los afectados por el incidente».
Por su parte, el Ejército filipino precisó que el hecho sepultó a decenas de trabajadores de una mina y a residentes en Maco. En tal sentido, la compañía Apex Mining indicó que 86 personas se encontraban en las inmediaciones y podrían haber sido afectadas, según expresó la vocera del Mando de Mindanao Oriental, Rosa María Manuel.
En la provincia se registraron intensas lluvias desde finales de enero, que según el Consejo Nacional de Gestión de Desastres y Reducción de Riesgos, con las inundaciones y los deslizamientos de tierra dejaron al menos 18 fallecidos y más de 1 millón de damnificados desde el 28 de enero, con 800.000 desplazados.