Tras un primer juicio llevado a cabo en diciembre, finalmente a inicios de febrero la justicia del distrito lo condenó a presidio perpetua por “asesinato en primer grado”, por lo que deberá pasar más de 50 años en la cárcel.
Una insólita pelea terminó en tragedia para dos amigos que fueron a comer en un local de Iowa, Estados Unidos, luego de que uno de ellos se enojara porque su acompañante colocó mayonesa en su plato sin que se lo solicitara.
Todo comenzó el 17 de diciembre del 2020, cuando Kristofer Erlbacher estaba en un bar junto a Caleb Solberg y una tercera persona, donde los tres estaban comiendo y bebiendo alcohol en lo que parecía ser una tranquila noche.
Sin embargo, la velada culminó de manera fatal debido a que Erlbacher puso mayonesa en la comida de Solberg, lo que desató la furia de este último y lo golpeó de manera instantánea.
Según reportaron medios locales, Erlbacher respondió a la agresión y se armó una pelea tan grande que incluso llamó al hermanastro de su amigo para amenazarlo con prenderle fuego a la casa en la que habitaban y dispararle con una escopeta.
Una vez recibida la llamada, el familiar fue hasta el local para ver qué estaba sucediendo, pero el victimario no halló nada mejor que chocar con su auto el del hermanastro y luego atropellar en tres ocasiones a Solberg, quitándole la vida de forma inmediata.
Tras un primer juicio llevado a cabo en diciembre, finalmente a inicios de febrero la justicia del distrito lo condenó a presidio perpetua por “asesinato en primer grado”, por lo que deberá pasar más de 50 años en la cárcel.